LIMA (Reuters) - El fiscal general de Perú, Pedro Chávarry, dijo que presentará su renuncia el martes en medio de críticas del Gobierno, sectores de la población y sus mismos colegas por su manejo del Ministerio Público y presuntos vínculos con una red de corrupción.
Chávarry ingresó al centro de una nueva crisis judicial tras remover del cargo, en vísperas de Año Nuevo, a dos fiscales que investigan presuntos sobornos de la firma brasileña Odebrecht a políticos en el país, medida que rectificó dos días por presión del presidente Martín Vizcarra.
El fiscal general, en un comunicado difundido la noche del lunes por Twitter, convocó a la junta de fiscales supremos para el martes a las 10.00 horas local (1500 GMT) para presentar su carta de renuncia al cargo en "aras de la autonomía de Ministerio Público" y "respeto a mi institución".
El anuncio se produce en medio de marchas de protestas en contra del fiscal general y luego de que el presidente Vizcarra presentó la semana pasada al Congreso un proyecto de ley para declarar en emergencia al Ministerio Público, que planteaba la salida de Chávarry y de todos los fiscales supremos.
Chávarry, quien asumió su cargo en julio por un período de tres años, esta siendo investigado junto a una red de jueces acusados de tráfico de influencias en el sistema judicial donde se pactaban nombramientos y condenas.
El fiscal supremo Tomás Gálvez, integrante de la junta de fiscales que también había solicitado la renuncia de Chávarry, dijo a la estación local de televisión Canal N que el sucesor del fiscal general será el funcionario más antiguo, Pablo Sánchez, quien ya ocupó ese cargo, salvo que no acepte el cargo.
(Información de Marco Aquino. Editado por Carlos Aliaga)