Por Mark Gleeson
DOHA, 5 dic (Reuters) - Achraf Hakimi nació en Madrid, pero no dudará en buscar la caída del seleccionado español en el partido que disputará el martes, junto con el resto de la selección marroquí, contra los campeones del mundo de 2010.
El rápido lateral es una de las piezas clave del conjunto norteafricano, cuyo partido de octavos de final contra España, en el estadio Education City de Rayán, les puede dar la oportunidad de alcanzar por primera vez los cuartos de final de un Mundial.
Hakimi podría incluso haber estado en el bando contrario, ya que fue convocado cuando aún era un adolescente para la selección juvenil de España.
"Vi que no era mi sitio adecuado, no me sentía como en casa. No era por nada en concreto, sino por lo que yo sentía, porque no era lo que había mamado y vivido en casa, que es la cultura árabe, ser marroquí", dijo al diario español Marca en la previa del choque del martes.
El padre de Hakimi era vendedor en las calles de Madrid y su madre limpiaba casas.
Su hijo fue fichado por el Real Madrid a los siete años, llegó al primer equipo, fue cedido al Borussia Dortmund, ganó el título de la Serie A con el Inter de Milán y ahora juega junto a Lionel Messi y Kylian Mbappé en el Paris Saint-Germain.
Y sólo tiene 24 años.
No será la primera vez que juegue contra España. Hakimi estuvo en el equipo que estuvo a punto de ganarles en Kaliningrado en 2018, en el que Iago Aspas consiguió un empate en los descuentos en el Mundial de Rusia de 2018 (2-2).
"Han pasado cuatro años de aprender grandes cosas. Vine con otra mentalidad y mucho más maduro", dijo.
MENTALIDAD GANADORA
"Siempre (España es favorita) para ganar, desde que empezó el Mundial. Está en el Top-5. (...) El míster nos ha transmitido también tener una mentalidad ganadora: da igual el que venga, tenemos que hacer nuestro juego, en la línea que estamos".
"Hemos sido primeros de grupo y yo creo que ya nos merecemos un poco de respeto. Creo que España sabe eso y que nos tiene que tener un poco de miedo. Nos tienen que tener miedo, la verdad. Y por qué no dar la sorpresa otra vez", se preguntó en voz alta.
Marruecos se aseguró el pase a octavos de final con una victoria sobre Bélgica (2-0) y después se impuso a Canadá (2-1) para ganar el Grupo F, dejando a Croacia como segunda.
"Es algo único, jugar para tu país. Y sobre todo ahora que estamos haciendo historia. Es increíble ver cómo lo está viviendo la gente, eso nos transmite bastante y nos da fuerza para continuar y hacer grandes cosas", añadió Hakimi.
(Editado en español por Benjamín Mejías Valencia)