Por Philip Pullella
CIUDAD DEL VATICANO (Reuters) - El Papa Francisco inauguró el miércoles una reunión de obispos con la Iglesia Católica en medio de una crisis debido a los casos de abusos sexuales e instó a no permitir que la fe de la nueva generación se vea apagada "por nuestras propias fallas, errores y pecados".
Ante la presión bajo la que se encuentra la Iglesia debido a abusos sexuales en todo el mundo, el arzobispo Charles Chaput de Filadelfia pidió la cancelación del "Sínodo de jóvenes" para que el Vaticano pueda concentrarse en preparar otra reunión de obispos sobre la prevención de abusos sexuales.
El cardenal Joseph Tobin, arzobispo de Newark, Nueva Jersey, se quedó en su diócesis para lidiar con las consecuencias del escándalo y el obispo holandés Robert Mutsaerts of Den Bosch optó por el boicot, con el argumento de que el sínodo carece de credibilidad.
Más de 250 obispos de todo el mundo asistirán a la reunión de un mes con cerca de 40 jóvenes invitados para participar como observadores.
Por primera vez, dos de los obispos provienen de China tras un acuerdo histórico que ha logrado el Vaticano este mes para mejorar los vínculos con el Gobierno chino. Cuando el Papa vio la presencia de los prelados chinos en su homilía durante una misa para decenas de miles de personas en la Plaza de San Pedro, la gente estalló en aplausos.
Aunque el título oficial del sínodo es "Jóvenes, Fe y Discernimiento Vocacional", el escándalo mundial de abusos sexuales actúa como telón de fondo y muchos creen que será parte de la agenda.
"Que el Espíritu nos dé la gracia de ser un recuerdo que es diligente, vivo y efectivo, que no se permita apagarse de una generación a la siguiente o ser aplastado por los profetas de la fatalidad y la mala fortuna, por nuestros propios fallos, errores y pecados", declaró el Papa Francisco en su homilía.
La Iglesia se enfrenta a una crisis por abusos sexuales en países entre los que están Chile, Alemania, Estados Unidos y Australia y el Vaticano sabe que tiene que ganarse a jóvenes desencantados.
El sínodo comenzó un día después de que un nuevo sondeo del Centro de Investigación Pew revelara que la confianza en la forma en que el Papa está gestionando la crisis de abusos sexuales se ha desplomado entre los católicos estadounidenses.
(Información de Philip Pullella. Editado en español por Patricio Abusleme)