Por Philip Pullella y Daria Sito-Sucic
SARAJEVO (Reuters) - El Papa Francisco llegó a Sarajevo el sábado con la petición de una reconciliación duradera 20 años después de la guerra de Bosnia.
La visita de un día es la tercera realizada por un Papa desde que Bosnia se separó de la Yugoslavia socialista y entró en una guerra entre 1992 y 1995 que se saldó con la muerte de 100.000 personas.
Bosnia sigue paralizada por el legado del conflicto, dividida por líneas étnicas y religiosas y sigue el camino de otros países de la antigua Yugoslavia hacia la integración con Occidente.
"A Sarajevo la llaman la Jerusalén de Occidente", dijo Francisco a los periodistas en el avión. "Es una ciudad de muy diferentes culturas étnicas y religiosas. Es también una ciudad que ha sufrido mucho durante su historia. Ahora se encuentra en un hermoso camino de paz. Hago este viaje para hablar de esto, en señal de paz y de una oración por la paz".
Su llegada se produce pocos días después de la entrada en vigor de un acuerdo histórico de la UE sobre vínculos más estrechos con Bosnia, un primer paso hacia una posible adhesión.
La medida es parte de una nueva iniciativa occidental para alentar el cambio político y económico con el dinero de la UE, y hacer frente a las frustraciones sobre la pobreza, el desempleo y la corrupción que suscitaron un malestar social sin precedentes en febrero del año pasado.
Se espera que decenas de miles de personas asistan a una misa en el estadio Kosevo de Sarajevo, 18 años después de que el Papa Juan Pablo II hiciese su propio llamamiento a "la valentía del perdón" en las ruinas de la ciudad.
Los católicos, la gran mayoría de ellos de etnia croata, representan alrededor del 15 por ciento de los 3,8 millones de personas que conforman la población de Bosnia, sacudida como otras comunidades por una ola de emigración durante y desde la guerra.
Bosnios musulmanes y serbios ortodoxos comparten el poder en un sistema difícil de manejar de cuotas étnicas establecidas en un acuerdo de paz intermediado por Estados Unidos en 1995 y plagado de politiquería nacionalista.
Mientras que a los bosnios les gustaría un Estado más centralizado y fuerte, los líderes serbios en su propia región autónoma están volviéndose cada vez más audaces en sus amenazas de secesión. Y los nacionalistas croatas también están pidiendo la creación de su propia entidad dentro de Bosnia, con el argumento de que sus derechos se encuentran amenazados.
Para lograr el acuerdo con la UE, los líderes políticos de Bosnia adoptaron el compromiso de llevar a cabo reformas económicas y la integración con Occidente, pero aún hay grandes obstáculos. 2015-06-06T102405Z_1007110001_LYNXMPEB5505M_RTROPTP_1_OESTP-BOSNIA-PAPA.JPG