Por Steve Holland
PALM BEACH, Florida (Reuters) - El presidente chino, Xi Jinping, instó a Estados Unidos a cooperar en materia de negocios e inversión, a la vez que invitó al líder estadounidense Donald Trump a visitar China, en un comienzo cordial de su primera reunión que probablemente sirva para abordar otros temas delicados de seguridad y comercio.
Trump dijo que quiere plantear ciertas inquietudes sobre las prácticas comerciales de China y presionar a Xi para frenar las ambiciones nucleares de Corea del Norte durante la visita de dos días del mandatario al complejo de Mar-a-Lago en Palm Beach, Florida, aunque no se esperan grandes acuerdos en ninguno de los dos temas.
Ambos lados deberán promover el "sano desarrollo del comercio bilateral y la inversión", y avanzar las negociaciones en un acuerdo de inversión, dijo Xi, según un comunicado publicado en la página del Ministerio de Asuntos Exteriores chino.
"Tenemos un millar de razones para mantener buenas relaciones entre China y EEUU y ni una sola para arruinar la relación entre China y EEUU", dijo Xi a Trump.
Trump aceptó la invitación de Xi para visitar China este año, dijo la agencia de noticias estatal china Xinhua citando a oficiales.
Trump bromeó antes de la cena: "Ya hemos tenido una larga conversación, y por ahora no he conseguido nada, absolutamente nada. Pero hemos desarrollado una amistad -puedo verlo- y pienso que a largo plazo vamos a tener una muy, muy buena relación y yo lo estoy deseando".
Este ambiente antes de la reunión del jueves se ensombreció por otro asunto de política exterior: la respuesta de EEUU al ataque mortal de gas en Siria.
En Pekín, el Ministerio de Asuntos Exteriores chino instó a todas las partes a encontrar un acuerdo político en Siria.
Trump prometió durante la campaña presidencial de 2016 parar lo que calificó de robo de trabajos estadounidenses por parte de China y reconstruir la base manufacturera del país. Muchos trabajadores le ayudaron a ganar las elecciones en noviembre y Trump quiere cumplir lo prometido.
"Hemos sido tratados de forma injusta y hemos hecho acuerdos de negocios terribles con China durante muchos, muchos años. Esa es una de las cosas sobre las que vamos a hablar", dijo Trump a los periodistas antes de la reunión.
"Aunque deseamos trabajar juntos, Estados Unidos reconoce los desafíos que China puede presentar a los intereses estadounidenses", dijo el secretario de Estado, Rex Tillerson, que también estaba en Florida para la reunión.
La hija de Trump, Ivanka, y su marido, Jared Kushner, que trabajan para la Casa Blanca, también estaban entre los invitados a la cena.