BRUSELAS (Reuters) - El primer ministro belga Charles Michel apoyó a su ministro de Interior tras sus comentarios de que un número significativo de musulmanes habían celebrado los ataques en Bruselas y dijo que los que apoyaban al terrorismo eran un cáncer que debía ser extirpado.
Jan Jambon dijo el sábado al diario belga De Standaard en una entrevista que una parte significativa de la comunidad musulmana había bailado con alegría después de los ataques que mataron a 32 personas el 22 de marzo.
Jambon, miembro del partido separatista flamenco N-VA, se enfrentó a las críticas de sus compañeros ministros y de la oposición, con demandas de que apoyara sus opiniones con pruebas o que se disculpase inmediatamente.
Michel apoyó a su ministro a última hora del domingo, diciendo que el consejo de seguridad nacional había sido informado de expresiones de apoyo a los atacantes de Bruselas.
"Puedo confirmar que ha habido apoyos a los ataques", dijo Michel en un comunicado, aunque esto vino de una pequeña minoría.
"No debemos ni generalizar ni maquillar esto", dijo Michel, añadiendo que Jambon no había generalizado.
Jambon dijo en la entrevista con De Standaard que anteriores gobiernos habían ignorado señales de aviso durante años y que las actuales medidas no tendrían un éxito inmediato.
"Una parte significativa de la comunidad musulmana bailó tras los ataques... esto es un problema de verdad", dijo Jambon a De Standaard.
"Podemos detener terroristas, quitarlos de la sociedad. Pero ellos son solo un grano. Debajo hay un cáncer mucho más difícil de tratar. Podemos hacerlo, pero no de la noche a la mañana", añadió.
El gobierno de Michel ha sido criticado por su gestión de la seguridad antes de los ataques. Jambon y el ministro de Justicia Koen Geens ofrecieron su dimisión a finales de marzo por los errores, aunque Michel pidió a ambos que se quedaran.
La ministra de Transporte dimitió el pasado viernes, tras las acusaciones de que había mentido sobre un informe de la UE que criticaba la seguridad del aeropuerto de Bruselas.