MADRID, 22 dic (Reuters) - Las restricciones en las celebraciones de Navidad debido a la pandemia de coronavirus en España quedaron en el olvido por un momento el martes cuando los niños del colegio de San Ildefonso cantaron el premio "Gordo" de la Lotería de Navidad en un sorteo con el debido distanciamiento social.
Ante un auditorio vacío, los niños, ataviados con mascarillas salvo cuando cantaban los números del bombo, cumplían con una tradición muy arraigada que desde hace más de dos siglos marca el comienzo de las celebraciones navideñas en España.
Este año el primer premio fue para el número 72.897, y fue repartido por numerosas localidades del territorio nacional.
Las complejas reglas del sorteo de Navidad permiten dividir en participaciones el boleto más común de 20 euros, denominado décimo, lo que hace imposible saber el número exacto de personas agraciadas. Un décimo premiado con El Gordo da derecho al cobro de 400.000 euros, aunque Hacienda se queda con un 20%.
Este año, la pandemia ha provocado una caída en las ventas del 11% a 2.600 millones de euros, ya que la gente ha viajado menos y pasado menos tiempo en los bares, empresas y asociaciones locales que suelen vender décimos y participaciones.
Los españoles suelen ser fieles a determinados vendedores, a veces peregrinando todos los años a las administraciones especialmente afortunadas o comprando boletos por internet. Los números que coinciden con fechas de grandes eventos como la muerte de un papa o una boda real a menudo se agotan.
Este año, uno de los números más buscados fue el 14.320, similar a la fecha en que el Gobierno español decretó el primer estado de alarma para confinar el país en el punto más álgido de una pandemia que ha causado más de 49.000 muertos en el país y hecho trizas una economía muy basada en turismo y servicios.
(Información de Emma Pinedo; editado por Jose Elías Rodríguez y Darío Fernández)