SHANGHAI (Reuters) - China y España firmaron esta semana en Pekín acuerdos empresariales valorados en 3.200 millones de euros durante una visita del presidente del Gobierno español al gigante asiático para lograr apoyos para su economía.
En una ceremonia en el Gran Salón del Pueblo de Pekín, varias empresas españolas y chinas firmaron 14 acuerdos en sectores como telecomunicaciones, energía nuclear o finanzas.
El presidente del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, que se reunirá con el presidente Xi Jinping el viernes, es el último mandatario europeo que visita China en busca de apoyo para la economía de su país por parte de la segunda mayor economía del mundo.
Fue recibido por el primer ministro Li Keqiang el jueves tras una reunión matutina de ejecutivos de empresas españolas y chinas en Shanghai, donde Rajoy pidió inversión china en España, diciendo que la economía española estaba bien encaminada después de sus problemas durante la crisis de deuda de la zona euro.
"Pocos países como España ofrecen tan buenas oportunidades de inversión en un entorno tan abierto y competitivo", dijo Rajoy en español, añadiendo que los sectores alimentario y de consumo eran áreas en las que las empresas de ambos países podrían aumentar su cooperación.
Entre las empresas que formaron parte de las reuniones estuvieron Banco Santander, Inditex y el gigante chino del comercio electrónico Alibaba, que protagonizó la semana pasada en Nueva York la mayor salida a bolsa de la historia.
No hubo mención el jueves a un posible acuerdo entre Inditex y Alibaba pese a informaciones de prensa en España de que Rajoy esperaba impulsar acuerdos entre el primer comercializador minorista de ropa del mundo y la empresa china, que tiene una capitalización bursátil de más de 220.000 millones de dólares.
En total se firmaron 14 acuerdos entre los que destacaron el de la china Huawei, la mayor fabricante de equipos de telecomunicaciones del mundo, y Telefónica, o un contrato de 150 megavatios en la provincia de Hebei para la fabricante de turbinas eólicas Gamesa.
España es uno de los pocos casos de éxito este año en la zona euro. Creció a su ritmo más rápido en seis años en el segundo trimestre, dejando atrás fases de recesión iniciadas en 2008 con el estallido de la burbuja inmobiliaria.
"Mientras la economía mundial se recupera lentamente, el comercio entre China y España ha estado creciendo contra corriente este año", dijo Li durante su reunión con Rajoy.
A medida que la economía china va madurando, sus empresas cada vez invierten más en el extranjero en busca de mayor rentabilidad. Este año está previsto que la inversión directa china en el exterior supere la inversión directa que recibe de las empresas extranjeras, dijo este mismo mes el Ministerio de Comercio.
Las firmas chinas invirtieron 90.200 millones de dólares en 156 países el año pasado, según datos del gobierno, un 17 por ciento interanual más.