Por Hamid Shalizi y Jessica Donati
KABUL (Reuters) - El exministro afgano de Finanzas Ashraf Ghani fue nombrado presidente electo el domingo después de firmar un acuerdo para compartir el poder con su oponente, poniendo fin a meses de confusión por unas elecciones que desestabilizaron al país mientras la mayoría de tropas extranjeras se preparan para irse.
La administración de Ghani ahora no sólo debe forjar un gobierno efectivo después de tanta acritud, sino también tratar con una insurgencia liderada por los talibanes que lleva a cabo ataques casi diarios en todo el país.
En el anuncio del pacto, las autoridades retuvieron las últimas cifras electorales, aparentemente como parte del acuerdo político entre Ghani y su rival Abdulá Abdulá, un ex ministro de Exteriores que aseguró que la votación se manipuló en su contra.
"La Comisión Independiente de Elecciones de Afganistán declara al Dr Ashraf Ghani Ahmadzai como el presidente de Afganistán", dijo el jefe de la comisión, Ahmad Yousuf Nuristani.
Bajo los términos del acuerdo de unidad, Ghani compartirá poder con un jefe ejecutivo propuesto por Abdulá. Los dos compartirán el control sobre quién lidera las instituciones clave como el Ejército y otras decisiones ejecutivas.
Nuristani reconoció los profundos fallos en la segunda vuelta de votaciones el 14 de junio y dijo que una auditoría supervisada por la ONU no era adecuada para eliminar todo fraude electoral. La auditoría costó 10 millones de dólares y se pagó con la ayuda económica de Estados Unidos, según las Naciones Unidas.
El último punto de conflicto en las negociaciones para formar un gobierno de unidad fue la insistencia de Abdulá para que el resultado de la votación final no fuese revelado, dijeron sus colaboradores. Se cree que Abdulá perdía ampliamente en los resultados oficiales.