Por Nidal al-Mughrabi y Henriette Chacar
GAZA/JERUSALÉN, 26 oct (Reuters) -Las fuerzas terrestres israelíes realizaron una gran incursión en Gaza durante la noche para atacar objetivos de Hamás, en un contexto de creciente indignación en todo el mundo árabe por el incesante bombardeo israelí al asediado enclave palestino.
La operación tuvo lugar después de que el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu dijo que sus tropas seguían preparándose para una invasión terrestre total, mientras Estados Unidos y otros países instaban a Israel a retrasarla, por que temen que pueda encender otros frentes en Oriente Medio.
La agencia de la ONU que proporciona ayuda a los civiles palestinos en Gaza dijo que podría tener que cerrar sus operaciones muy pronto si no llega combustible al territorio gobernado por Hamás, en medio de una desesperada necesidad de refugio, agua, alimentos y servicios médicos.
El Ministerio de Salud de Gaza dijo el jueves que 7.028 palestinos habían muerto ya por los ataques aéreos de represalia de Israel, entre ellos 2.913 niños.
Israel ha bombardeado intensamente durante casi tres semanas la densamente poblada Franja de Gaza tras el ataque del 7 de octubre de Hamás contra comunidades israelíes en el que murieron unas 1.400 personas, según el recuento oficial.
El miércoles, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, puso en duda las cifras de víctimas palestinas, que según un portavoz militar israelí no eran fiables.
Sin embargo, el ejército no ha proporcionado ninguna evaluación propia y el portavoz del Ministerio de Salud de Gaza, Ashraf al-Qidra, rechazó las declaraciones que cuestionaban las cifras.
El Ministerio de Sanidad publicó el jueves un documento de 212 páginas que, según dijo, contiene los nombres de todas las víctimas con sus números de identificación.
La radio del ejército israelí dijo que las tropas habían realizado durante la noche su mayor incursión en el norte de Gaza de la actual guerra.
Un vídeo militar mostró a vehículos blindados cruzando la barrera fortificada desde Israel y volando edificios en preparación para las siguientes fases del combate.
"Tanques e infantería atacaron numerosas células terroristas, infraestructuras y puestos de lanzamiento de misiles antitanque", señaló.
Los palestinos informaron de que la aviación israelí había vuelto a bombardear el territorio durante la noche y los habitantes del centro de Gaza, incluido el campo de refugiados de Bureij, informaron de intensos bombardeos con tanques durante toda la noche.
CRÍTICAS ÁRABES
Mientras proseguía el derramamiento de sangre sin señales de una tregua, los ministros de Asuntos Exteriores de Emiratos Árabes Unidos, Jordania, Bahréin, Arabia Saudí, Omán, Qatar, Kuwait, Egipto y Marruecos condenaron los ataques contra civiles y las violaciones del derecho internacional en Gaza.
En un comunicado conjunto dijeron que el derecho a la autodefensa no justifica el incumplimiento de la ley y la vulneración de los derechos de los palestinos. Los ministros árabes también condenaron los desplazamientos forzosos y los castigos colectivos a los palestinos de Gaza.
Criticaron la ocupación continuada de zonas palestinas por parte de Israel y pidieron más esfuerzos para aplicar una solución de dos Estados al conflicto que dura ya décadas, una idea que ha sido la base de un proceso de paz que durante mucho tiempo ha agonizado.
"La ausencia de una solución política al conflicto palestino-israelí ha provocado repetidos actos de violencia y sufrimiento a los pueblos palestino e israelí y a los de la región", afirmó.
El apoyo a Israel llegó de los Gobiernos europeos.
El canciller alemán, Olaf Scholz, declaró que los líderes de la UE reunidos el viernes en Bruselas enviarán una clara señal de respaldo a Israel en lo que denominó sus esfuerzos de autodefensa.
REHENES
También aumentó la preocupación por la suerte de los más de 200 rehenes secuestrados por Hamás en el asalto del 7 de octubre y trasladados a Gaza.
Un portavoz del brazo armado de Hamás, las Brigadas al Qassam, dijo el jueves que unos 50 cautivos habían muerto en Gaza debido a los ataques israelíes. No dio más detalles y Reuters no pudo verificar las cifras.
En una conversación telefónica con Netanyahu, Biden habló de los esfuerzos para localizar y poner a salvo a los estadounidenses que se cree que están secuestrados en Gaza.
Israel dijo que había 224 rehenes, cuya presencia complica cualquier invasión terrestre israelí. Entre los retenidos hay varios que tienen pasaportes extranjeros. Hamás ha liberado a cuatro cautivos desde el viernes y Gaza comenzó a recibir una pequeña cantidad de ayuda al día siguiente.
Un negociador qatarí declaró a Sky News que una pausa en los combates podría ayudar a conseguir la liberación de más rehenes en los próximos días.
MÁS MUERTES
En el campo de refugiados de Jabalia, en el norte de Gaza, un ataque aéreo israelí alcanzó una casa, matando a una madre, sus tres hijas y un bebé, cuyo padre sostuvo su cuerpo en el hospital.
"¿Ha matado? ¿Ha herido a alguien? ¿Capturó a alguien? Eran niños inocentes dentro de su casa", dijo.
El director del hospital Nasser de la ciudad meridional de Jan Yunis, Nahed Abu Taaema, dijo que durante la noche habían llegado los cadáveres de 77 personas muertas en ataques aéreos, la mayoría mujeres y niños, informó la emisora de radio Al-Aqsa de Hamás.
Muchos palestinos se refugian en los hospitales, escuelas, viviendas y campos de refugiados de Jan Yunis, y en la calle, después de que Israel les advirtió de que abandonaran sus hogares en el norte.
Israel no respondió directamente al reporte, pero dijo que sus fuerzas habían atacado un puesto de lanzamiento de misiles de Hamás en la zona de Jan Yunis que estaba junto a una mezquita y una guardería.
No estaba claro si ambas partes se referían al mismo incidente.
La agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos, UNRWA, dijo que necesitaba urgentemente combustible para mantener las operaciones humanitarias que salvan vidas en Gaza. Israel ha impedido la entrada de combustible con los envíos de ayuda, alegando que podría ser confiscado por Hamás.
Más de 613.000 personas que se han quedado sin hogar a causa de la guerra se refugian en 150 instalaciones de la UNRWA repartidas por el destrozado territorio.
"En las últimas 24 horas otros tres miembros del personal de la UNRWA han sido asesinados, lo que eleva el total a 38 miembros del personal muertos", dijo la UNRWA.
Alrededor del mediodía del jueves, según funcionarios del Hospital Nasser en la ciudad sureña de Jan Yunis, Israel bombardeó un área no muy lejos de un refugio de la UNRWA para desplazados, matando al menos a 18 personas y causando pánico entre los desplazados.
Mahmoud Shameya, refugiado allí con su esposa y sus tres hijos, dijo que vivían en constante terror debido a los continuos bombardeos israelíes.
"Insto al mundo entero a que nos proteja", dijo. "Dormimos entre ruidos de explosiones y nos despertamos con ruidos de explosiones, los niños siempre se tapan los oídos con las manos".
Los suministros humanitarios son muy escasos, pero las potencias mundiales no consiguieron ponerse de acuerdo en Naciones Unidas sobre cómo pedir una tregua en los combates para hacer llegar cantidades significativas de ayuda.
(Reporte de Nidal al-Mughrabi, Henrietta Chacar, Emily Rose, Jeff Mason, Phil Stewart y Michelle Nichols; redactado por Grant McCool y Michael Perry; editado por Howard Goller y Stephen Coates y Miral Fahmy; editado en español por Javier López de Lérida)