Por Isabel Coles
ARBIL, Irak (Reuters) - Autoridades kurdo iraquíes dijeron el sábado que tenían pruebas de que el Estado Islámico había utilizado gas de cloro como arma química contra sus combatientes peshmerga.
El Consejo de Seguridad de la región semiautónoma del Kurdistán dijo en un comunicado a Reuters que los peshmerga tomaron muestras del suelo y la ropa tras un ataque suicida con bomba perpetrado por el Estado Islámico en el norte de Irak en enero.
El consejo dijo que los resultados de análisis de laboratorio señalan que las "muestras contenían niveles de cloro que sugerían que la sustancia fue utilizada como arma".
El cloro es un agente asfixiante cuyo uso como arma química data de la Primera Guerra Mundial. Su utilización está prohibida según la Convención de Armas Químicas de 1997, que veta todo uso de agentes tóxicos en el campo de batalla.
La acusación de los kurdos no pudo ser confirmada de manera independiente.
Peter Sawczak, portavoz de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPCW) dijo, "no hemos recibido una solicitud de Irak de investigar las afirmaciones sobre el uso de armas químicas en Irak y la OPCW no puede verificar de inmediato las acusaciones".
El cloro fue usado "sistemáticamente" en la guerra civil en la vecina Siria, concluyó una misión investigadora de la OPCW el año pasado. La OPCW tendría que obtener sus propias muestras para confirmar el uso de armas químicas en un estado miembro.
El comunicado de los kurdos dijo que el ataque suicida con bomba que perpetró el Estado Islámico el 23 de enero se produjo en una carretera entre Mosul y la frontera siria. Una fuente de seguridad kurda dijo que los peshmerga dispararon un cohete al vehículo que llevaba la bomba por lo que no hubo heridos a causa del incidente excepto por el atacante suicida.
Cerca de una decena de combatientes peshmerga experimentó síntomas como náuseas, vómitos, mareos o debilidad, dijo la fuente.
El comunicado dijo que los análisis fueron realizados en un laboratorio certificado por la Unión Europea después de que las muestras del suelo y las prendas fueran enviadas por el Gobierno Regional del Kurdistán a una "nación socia" en la coalición liderada por Estados Unidos que combate al Estado Islámico en Irak y Siria.
La fuente describió las muestras como "restos del atacante suicida", pero declinó identificar el laboratorio.
Los kurdos iraquíes fueron víctimas del ataque químico más letal en tiempos modernos, cuando fuerzas aéreas de Saddam Hussein bombardearon la ciudad de Halabja en 1988, esparciendo gas y causando la muerte de al menos 5.000 personas.