MADRID (Reuters) - La CUP se presentará a las elecciones catalanas del 21 de diciembre tras una votación asamblearia en la que más del 91 por ciento de sus miembros votó a favor de participar en unos comicios que el grupo independentista y anticapitalista considera "ilegítimos" al haber sido convocados por Madrid.
"(La asamblea de la CUP) ha decidido concurrir a las elecciones ilegítimas del 21-D y liderar una candidatura lo más amplia posible, claramente rupturista, independentista y de izquierdas", dijo el grupo en Twitter.
Las elecciones, que forman parte de las medidas de intervención del Gobierno español en Cataluña para frenar las ambiciones independentistas en la región, habían puesto en un dilema a la CUP (Candidatura de Unidad Popular) y a las otras dos formaciones que en conjunto daban mayoría al independentismo en el disuelto Parlament.
Los tres grupos separatistas tenían que elegir entre presentarse a un proceso electoral organizado por un Estado cuya autoridad rechazan o dejar el Parlamento y el gobierno regional en manos de los partidos a favor de la pertenencia a España, además de renunciar a la financiación que otorga la política institucional.
Al igual que la formación de izquierdas Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), que presentó esta semana una lista provisional para las elecciones, la CUP había rechazado la propuesta de los conservadores del PDeCat (Partido Demócrata Europeo Catalán) de presentar una lista única que agrupara a las fuerzas independentistas.
Por su parte, el destituido presidente catalán, Carles Puigdemont, del PDeCat, se mostró el viernes dispuesto a liderar una candidatura ciudadana independentista para las autonómicas desde Bélgica, donde se encuentra en libertad vigilada, tras una orden de arresto internacional de la Audiencia Nacional por los delitos de los que se le investiga en relación con el proceso independentista.
Ante la posibilidad de articular una lista ciudadana en torno al expresident, el PDeCat ha aplazado a esta semana el consejo en el que definirá su candidatura de cara a unas elecciones en las que, según las encuestas, sufrirá un importante descalabro si se presenta en solitario y ERC podría ser el partido más votado.
PDeCat y ERC fueron socios en el Govern bajo la plataforma Junts Pel Sí (JxSí) hasta la disolución del Gobierno catalán por parte del ejecutivo central a finales de octubre.