GINEBRA (Reuters) - Un comité de la Organización Mundial de la Salud formado por expertos dijo el martes que era ético ofrecer medicamentos no probados o vacunas como tratamiento potencial o preventivo en el brote mortal del ébola en el oeste de África.
El organismo de las Naciones Unidas dijo que la provisión de medicamentos experimentales requería del "consentimiento informado, la libertad de elección, la confidencialidad, el respeto a la persona, la preservación de la dignidad y la implicación de la comunidad".
El comité se reunió para discutir si era posible administrar los medicamentos experimentales y las vacunas que se están desarrollando contra el ébola pese a no haber sido probadas plenamente ni contar con licencia.
La reunión fue convocada tras la administración de un medicamento experimental llamado ZMapp, realizado por la compañía biotecnológica estadounidense Mapp Biopharmaceutical, a dos trabajadores sanitarios estadounidenses infectados con ébola en Liberia.
Ese mismo suero se le estaba administrando al sacerdote español Miguel Pajares, que falleció el martes en Madrid, donde había sido trasladado desde Liberia para ser tratado en España del virus infeccioso.
"Los brotes de ébola pueden contenerse usando las intervenciones disponibles, como una detección y aislamiento temprano, el rastreo del contacto y la vigilancia, y la adherencia a procedimientos rigurosos de control de la infección", dijo el comité en un comunicado.
"Sin embargo, el tratamiento específico o vacuna sería un potente activo contra el virus", añadió.