SANÁ (Reuters) - Los opositores de la milicia houthi de Yemen anunciaron el sábado la formación de una alianza nacional para restaurar la autoridad del Estado, en un movimiento que ha sacudido los cimientos del panorama político yemení.
Los musulmanes chiíes houthi invadieron en septiembre la capital de Yemen, Saná, y disolvieron el Parlamento el mes pasado. Sus actos dejaron un vacío político que amenaza con llevar al país a la guerra civil.
La coalición, llamada Alianza de Salvación Nacional, une oficialmente a distintas facciones y divisiones ideológicas de todo el país. Podría fortalecer su posición en las conversaciones con las Naciones Unidas, que continúan en curso actualmente, para la creación de un gobierno de unidad nacional.
"Su objetivo es impedir el colapso y la desintegración del estado, mientras busca crear un Yemen democrático y federal que rechace a las milicias sin importar de qué lado estén", dijo a Reuters Manea al-Matari, una antigua líder de protestas y actualmente miembro del bloque.
Los siete partidos incluyen activistas, islamistas y miembros del anterior partido gobernante de Yemen, que apoyó al presidente Abd-Rabbu Mansour Hadi desde su sede al sur del país.
Reemplaza al Grupo Mixto de Reuniones, un partido paraguas fundado en 2005. Aglutinaba a muchos de los colectivos opuestos al predecesor de Hadi, el veterano autócrata Ali Abdullah Saleh, hasta que fue derrocado en las protestas de la primavera árabe de 2011.
No hubo comentarios inmediatos al respecto por parte de los houthi ni del mediador de las Naciones Unidas Jamal Benomar durante una entrevista con el canal panárabe Al-Jazeera emitida el sábado.
"La pelota está en el tejado de las facciones y los partidos políticos. Tienen que ser más serios esta vez, porque la situación es muy peligrosa", dijo Benomar.