Por Ellen Wulfhorst y Scott Malone
FERGUSON, EEUU (Reuters) - La Policía empleó el lunes gas lacrimógeno y granadas de aturdimiento contra los manifestantes en Ferguson, Misuri, tras días de agitación por la muerte de un adolescente negro desarmado que fue tiroteado por un policía blanco.
La acción policial se produjo horas después de unas protestas callejeras que habían sido tensas pero en su mayoría pacíficas, dijeron testigos de Reuters, que agregaron que un proyectil lanzado desde una multitud de manifestantes impactó en el suelo y estalló en llamas.
Los manifestantes lanzaron proyectiles pequeños, posiblemente piedras, a los policías vestidos con equipo antidisturbios y flanqueados por vehículos blindados.
La Policía arrestó al menos a cuatro personas. Un agente de policía fue escuchado en una emisión de CNN diciendo que había una "víctima de un disparo", mientras ordenaba a los medios de comunicación que despejaran el lugar.
El gobernador de Misuri había levantado el lunes el toque de queda en el barrio de Ferguson en St. Louis, después de que pidiera a la Guardia Nacional el envío de tropas para restablecer el orden.
El despliegue de la Guardia Nacional es la medida más reciente de las autoridades para poner fin a los saqueos e incendios de tiendas que han marcado las protestas y han generado preguntas sobre las relaciones raciales en Estados Unidos desde la muerte a tiros de Michael Brown, de 18 años, el 9 de agosto.
El gobernador Jay Nixon, que declaró el estado de emergencia en la ciudad el sábado y ordenó que las calles fueran despejadas para un toque de queda que se extendió desde la medianoche hasta las 05.00 horal local, dijo que la Guardia Nacional quedaría bajo la supervisión de la Patrulla de Caminos de Misuri.
Efectivos de la Guardia Nacional podían ser vistos caminando en los márgenes de la protesta, manteniendo una distancia con los manifestantes.
El presidente Barack Obama dijo al gobernador que el uso de la Guardia Nacional debe ser limitado, e instó a la curación en lugar de la violencia. El fiscal general Eric Holder viajará el miércoles a Ferguson, destacó el mandatario.
A los manifestantes no se les permitiría congregarse en las calles el lunes, dijo a la prensa el capitán de la policía del estado de Misuri a cargo de la escena al principio del día.
Al menos una persona fue vista siendo detenida por una decena de agentes de la Policía.
"Pese a que entiendo las pasiones y el enfado por la muerte de Michael Brown, ceder al odio llevando armas o atacando a la Policía sólo sirve para elevar las tensiones y provocar caos", sostuvo Obama en una rueda de prensa. "Esto socava, en lugar de avanzar, la justicia", agregó.
El presidente se reunió el lunes con Holder para discutir la situación en Ferguson.
"Por otra parte, siguiendo mis órdenes, se está realizando un examen médico adicional al cuerpo de Michael Brown", dijo Holder. Los resultados de las autopsias oficiales de las autoridades federales y del condado están pendientes.
La autopsia realizada en nombre de la familia de Brown demostró que le dispararon al menos seis veces, incluyendo dos veces en la cabeza.
La trayectoria de una de las balas indica que Brown podría haber estado bajando la cabeza, en señal de rendirse, cuando recibió el tiro fatal, dijo el abogado de la familia, Daryl Parks.
De acuerdo con la policía, el agente involucrado en el tiroteo dijo que disparó inicialmente después de que Brown metiera la mano en su coche policial.
Parks dijo en una rueda de prensa una bala alcanzó a Brown en la parte superior de la cabeza y otra le destrozó el ojo derecho.
"Su cabeza estaba en una posición hacia abajo", dijo Parks. "Teniendo en cuenta ese tipo de hechos, este funcionario debería haber sido arrestado", sostuvo Parks.
No había señales de lucha con el oficial ni de residuos de pólvora en el cuerpo.