Por Barbara Lewis y Emma Pinedo
BRUSELAS/MADRID (Reuters) - La Comisión Europa ha prometido 28 millones de euros para ayudar a los productores lácteos en Estonia, Letonia y Lituania dentro de una serie de medidas de emergencia para contrarrestar la prohibición rusa a las importaciones de alimentos de Occidente, mientras los productores españoles reclaman ayudas para contener la caída de los precios.
Moscú impuso en agosto un embargo de un año a la carne, pescado, lácteos, frutas y verduras de Estados Unidos, Unión Europea, Canadá, Australia y Noruega en represalia por las sanciones occidentales impuestas sobre Rusia por su papel en la crisis de Ucrania.
En respuesta, la Comisión, el ejecutivo de la UE, ha apoyado económicamente a una serie de negocios agrícolas, como a productores de fruta y verduras y productos lácteos.
Antes de la ayuda a los productores bálticos, las ayudas de la UE al sector lácteo han sido para el almacenamiento privado de mantequilla, leche desnatada en polvo y la ampliación de los periodos de intervención pública de ambos productos hasta finales de 2014.
El comisario de Agricultura, Phil Hogan, dijo que el impacto del veto ruso había sido particularmente duro para los productores lácteos del Báltico porque dependen del vecino mercado ruso.
El dinero de la UE, que se prevé que obtenga la aprobación final antes de fin de mes, ayudará a los productores que "tengan problemas de liquidez en circunstancias excepcionales", dijo.
EL AÑO 2015, ¿CATASTRÓFICO EN ESPAÑA?
Mientras, los productores españoles han solicitado a Bruselas que active medidas para combatir la crisis en el sector, tras reunirse con las autoridades europeas.
Los precios han caído en España un 15 por ciento desde el mes de marzo a unos 0,335 euros/litro en noviembre, según estimaciones de la Unión de Pequeños Agricultores, y el sector pronostica un 2015 "catastrófico" si no cambia la tendencia.
"Hemos exigido el incremento de los precios de intervención pública al menos hasta niveles que cubran los costes de producción de los ganaderos, que están muy por encima de los 0,22 euros/litro", dijo el martes el secretario de ganadería de la UPA, Román Santalla, en una nota de prensa.
Actualmente, 0,22 euros/litro es el precio a partir del cual se activan las medidas de crisis.
La Organización de Productores de Leche española (OPL) prevé la desaparición de alrededor del 30 por ciento en las granjas de vacuno si continúan las bajadas de precio en origen en los próximos dos años y los precios no recuperan como mínimo los 0,35 euros/litro que cubren los costes medios de producción.
Al veto ruso se suma la decisión de China de bajar la demanda para presionar para comprar leche y mantequilla a menor precio y la incertidumbre por el final del sistema de cuotas en la Unión Europea a partir de abril de 2015, que liberaliza el sector y ha llevado a muchos agricultores a aumentar su producción en 2014.
Dicho aumento de producción hace que España pueda rebasar su cuota (6.500 toneladas de leche al año) entre un 1,45 y un 2,97 por ciento, según estimaciones del Ministerio de Agricultura, por lo que Bruselas podría imponer una multa cuando acabe la campaña.
Para anticipar el pago de la denominada "supertasa", Agricultura retendrá a partir de diciembre un 10 por ciento por litro (2,8 céntimos) a los productores que ya hayan excedido su cupo, lo que empeorará la situación económica de los ganaderos.
Si no hay multa, cuya cuantía no está determinada, Agricultura devolvería el dinero, pero si la hay, y supera los 0,27 euros/litro, se exigiría un nuevo pago.
El sector lácteo español está compuesto por 1.550 empresas, un 5,4 por ciento del total de industrias alimentarias, y da empleo a unas 25.000 personas, según datos del Ministerio de Agricultura de 2013.