Por Alexander Saeedy
BRUSELAS, 16 junio (Reuters) - Marine Le Pen, Geert Wilders y otros líderes de la extrema derecha italiana, austriaca y belga han acordado el martes finalmente formar un bloque común en el Parlamento europeo, un año después del auge euroescéptico que se vivió en las elecciones europeas.
Las diferencias entre los partidos que se oponen a la Unión Europea y a la inmigración masiva, que ganaron el 12 por ciento de los escaños en mayo del año pasado, vieron al Partido de la Independencia de Reino Unido (UKIP) formar una alianza, pero el Frente Nacional (FN) de Le Pen y el holandés Partido de la Libertad (PVV) del Wilders se quedaron por debajo del número de miembros necesarios para tener derecho a los poderes y a la financiación que se obtienen con el estatus de bloque.
Un obstáculo clave era la necesidad de incluir a legisladores de siete estados europeos. Sin embargo, Le Pen, que dirigirá el nuevo bloque, Europa de Naciones y Libertad, ha asegurado que han logrado sortear este obstáculo incluyendo a dos miembros polacos y a un británico, en concreto a Janice Atkinson, que fue despedida del UKIP debido a un escándalo de gastos el pasado mes de marzo.
"La Unión Europea está trabajando para destruir la nación y estamos aquí para defender a nuestra gente", dijo en una rueda de prensa Le Pen, cuyo grupo contará con 39 de los 751 miembros. Wilders aseguró que el bloque luchará contra la "islamización" de Europa.
Nigel Farage, el líder del potente bloque de Europa de la Libertad y la Democracia que incluye el Movimiento 5 Estrellas del italiano Beppe Grillo, ha rechazado propuestas anteriores de Le Pen y Wilders, citando en particular el histórico antisemitismo del FN.
El nuevo bloque estará formado, además de por el FN y el PVV, por la Liga Norte italiana, el Partido de la Libertad austriaco y por los nacionalistas flamencos del Vlaams Belang, junto al Congreso de la Nueva Derecha polaco, junto a Atkinson.
El húngaro Jobbik y el griego Amanecer Dorado, con tres escaños cada uno, son los principales partidos de extrema derecha que no están vinculados a ningún bloque.
La Red Europea contra el Racismo ha expresado su descontento porque el nuevo bloque recibirá más financiación para promover sus ideas, ya que los grupos parlamentarios tienen unos beneficios políticos y financieros significativos.