Por Lisa Rapaport
(Reuters Health) - Un equipo de investigadores observó cenas en restaurantes con servicio de buffet italiano libre y advirtió que los hombres que compartían la mesa con por lo menos una mujer comían un 93 por ciento más de pizza que los que sólo tenían compañía masculina.
La tendencia a comer de más también alcanzó a las versiones saludables: los hombres comían un 86 por ciento más de ensalada si estaban en compañía de una mujer.
"Hallamos que mientras los hombres comen desproporcionadamente más cuando están con una mujer, ellas sienten que también comen de más y apuradas cuando comparten la mesa con hombres, aunque no hubiera evidencia de ello", dijo el autor principal, Kevin Kniffin, de la Escuela Dyson de Economía Aplicada y Administración de la Universidad de Cornell, en Ithaca, Nueva York.
"Las personas deberían tranquilizarse cuando comen con personas del sexo opuesto", agregó Kniffin por correo electrónico.
Su equipo pidió a 74 hombres y 59 mujeres en un restaurante italiano con un menú ilimitado de pizza, ensaladas y acompañamientos que participaran de un experimento durante el almuerzo.
Los autores les preguntaban por qué habían elegido el lugar y si habían considerado ir a comer a otros sitios, para distraerlos del motivo real del estudio. Luego, se sentaron a observar cuánto comían de acuerdo con la compañía que tuvieran en la mesa.
Los hombres que comían con mujeres consumían unas tres porciones de pizza y cinco platos de ensalada, que se compara con alrededor de 1,5 porciones de pizza y menos de tres platos de ensalada cuando comían en compañía de otros hombres.}
En tanto, las mujeres consumían más ensalada y menos pizza cuando almorzaban con otras mujeres.
Es posible que los hombres puedan estar señalando inconscientemente su aptitud biológica comiendo de manera excesiva, esencialmente presumiendo para parecer más atractivos a una posible pareja, afirmó Kniffin.
Además del tamaño del estudio, las limitaciones incluyen la falta de contexto social de las comidas, que podría aportar pistas sobre cómo varían los hábitos alimenticios entre una cita y un almuerzo de negocios, según publica el equipo en Evolutionary Psychological Science.
Para Samantha Heller, nutricionista del Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York, y que no participó del estudio, sería demasiado asumir que los hombres comen más pizza delante de una mujer sólo para impresionarla.
Los nervios, el entorno social y quién paga podrían contribuir a cuánto comen los hombres en las citas, por ejemplo, afirmó Heller por correo electrónico.
Aunque es difícil dar recomendaciones nutricionales basadas en un estudio tan pequeño, Heller dijo que aún se puede aplicar guías alimentarias generales para comer en forma saludable cuando hombres y mujeres cenan juntos.