Por Fatos Bytyci
PRISTINA, 1 ene (Reuters) - Cientos de kosovares corrieron el lunes al aeropuerto de Pristina para viajar a países de la Unión Europea tras la exención de visados para la zona Schengen de fronteras abiertas de Europa.
Kosovo era el único país de los Balcanes Occidentales cuyos ciudadanos seguían necesitando visado para viajar a la UE, muchos de cuyos miembros forman parte del programa.
"Me siento libre como un pájaro ahora que puedo viajar por toda (Europa)", dijo Habib Spahiu, que viajaba con su hijo para una visita de dos días a Viena.
Formaba parte de un grupo de 50 personas que ganaron una lotería estatal, pagada por el Gobierno, y que hicieron el viaje para conmemorar el proceso de exención de visados.
El primer ministro de Kosovo, Albin Kurti, saludó a los viajeros en el aeropuerto.
"Llevamos mucho tiempo esperando, ha sido una larga injusticia, pero por fin lo hemos conseguido", dijo Kurti.
El espacio Schengen permite a más de 400 millones de personas viajar libremente entre los países miembros sin pasar por controles fronterizos.
Los estrictos requisitos de los Estados miembros de la UE y las disputas internas han retrasado el proceso durante muchos años.
En 2018, la UE dijo que se cumplían todos los requisitos, pero Francia y Países Bajos frenaron la decisión por temor a una nueva oleada migratoria.
Kosovo declaró su independencia de Serbia en 2008, pero sigue luchando por convertirse en Estado miembro de la ONU debido a las objeciones de Serbia, Rusia y China.
Su condición de Estado está reconocida por más de 110 países, pero sus 1,8 millones de ciudadanos pueden viajar a menos de 20 Estados sin visado.
Kosovo sigue siendo uno de los países más pobres de Europa y muchos ven en la exención de visado una oportunidad para conseguir trabajo.
"Voy a Alemania unos días para buscar trabajo y volveré para solicitar un visado de trabajo", dijo un trabajador de la construcción, que no quiso dar su nombre, mientras esperaba su tarjeta de embarque.
El Gobierno ha pedido a la gente que no abuse de las normas de Schengen, que establecen que las personas pueden permanecer 90 días dentro de un período de 180 días como turistas, pero no trabajar.
(Reporte de Fatos Bytyci; editado en español por Benjamín Mejías Valencia)