Por Syed Raza Hassan y Maria Golovnina
ISLAMABAD (Reuters) - Soldados y fuerzas paramilitares pakistaníes custodiaban el lunes las oficinas centrales del canal de televisión estatal PTV, después de que una multitud de manifestantes antigubernamentales entraran al edificio e interu`mpiesen su señal.
Los manifestantes liderados por los opositores Imran Khan, un popular jugador de cricket convertido en político, y Tahir ul-Qadri, un clérigo, han estado en las calles durante semanas tratando de derrocar el Gobierno del primer ministro Nawaz Sharif.
Las protestas degeneraron en un caos el fin de semana, con los manifestantes enfrentándose a la policía en un área del centro cercana a edificios del Gobierno y embajadas, lo que terminó con tres personas muertas.
Sharif, que fue derrocado por el Ejército en un golpe militar de 1999 pero volvió mediante una gran victoria electoral en mayo del año pasado, se ha negado a renunciar. En tanto, los líderes de la oposición han rechazado sus llamamientos al diálogo, creando un peligroso estancamiento.
Los enfrentamientos estallaron el lunes temprano y continuaron esporádicamente durante el día. El canal de televisión estatal PTV y su servicio en inglés PTV World fueron interrumpidos después de que los manifestantes entrasen en sus instalaciones.
Una fuente de PTV dijo a Reuters que los manifestantes habían ocupado la principal sala de control y habían roto algunos equipos. Miembros uniformados de una fuerza paramilitar y soldados luego aseguraron el edificio y el canal volvió a emitir.
En el país con armas nucleares, donde el poder ha cambiado frecuentemente de manos a través de golpes militares en lugar de elecciones, el Ejército probablemente juegue un papel clave en cómo se desarrolle el conflicto, pero no ha intervenido directamente, más allá de reunirse con los protaganistas e instarlos a la moderación.
El jefe del Ejército, el general Raheel Sharif y el primer ministro Sharif se reunieron el lunes, pero no estaba claro qué temas debatieron.