Por Matthias Blamont
PARÍS(Reuters) - El presidente del gobierno francés, Emmanuel Macron, prometió el martes inyectar más dinero en el sistema público sanitario y contratar a más médicos para zonas rurales con el fin de reducir la presión en los hospitales, afectados por las limitaciones presupuestarias y el cierre de clínicas fuera de las ciudades.
El gasto sanitario aumentará en un 2,5 por ciento en 2019, un incremento mayor del objetivo inicial, situado en el 2,3 por ciento, lo que se traduce en una inyección extra de 400 millones de euros en un presupuesto cercano a los 200.000 millones de euros, según Macron.
"El sistema hospitalario terminará colapsando si no se hacen cambios", dijo Macron en un discurso en el Palacio del Elíseo. "Necesitamos replantearnos cómo será el sistema sanitario en los próximos 50 años".
El sistema de salud público de Francia es considerado el mejor del mundo, pero una población cada vez más envejecida unida a limitaciones financieras, lo han puesto contra las cuerdas.
Cada vez son más los pacientes que se quejan de las abarrotadas salas de emergencias y del tiempo que se tarda en ir a un hospital cercano en zonas rurales, mientras los enfermeros lamentan en muchas ocasiones la escasez de camas y personal sanitario.
El anuncio de Macron llegó días después de que revelara un plan separado contra la pobreza de 8.000 millones de euros. En Francia unas 8,8 millones de personas viven bajo el umbral de la pobreza.
Macron también espera que sus reformas sociales ayuden a recuperar su enorme caída en popularidad y a hacer frente a las críticas de la izquierda, que le acusa de ser el presidente de los ricos.
(Información de Matthias Blamont, Julie Carriat, Marine Pennetier; editado por Richard Balmforth; traducido por Sabela Ojea Guix en la redacción de Madrid)