MADRID (Reuters) - Miles de personas celebraron el domingo en Madrid y en diversas ciudades españolas la retirada esta semana del polémico anteproyecto de reforma de la ley del aborto, en el Día de Acción Global por la Despenalización del Aborto.
Las marchas, que se celebraron en 38 ciudades españolas, estaban convocadas como protesta por el proyecto que preparaba el Gobierno. Finalmente, se convirtieron en un acto festivo después de que el Ejecutivo anunciara esta semana que no seguiría adelante con la reforma, lo que provocó la dimisión del ministro de Justicia Alberto Ruiz-Gallardón.
En Madrid, la marcha convocada por la Coordinadora Feminista transcurrió bajo la lluvia bajo el lema "Nosotras decidimos. Aborto libre", mientras las participantes coreaban lemas como "Fuera el aborto del Código Penal" o "Gallardón se ha quedado sin sillón".
"Las mujeres no somos delincuentes, sabemos perfectamente lo que queremos hacer con nuestra vida y no queremos ser tuteladas por nadie", dijo Mar Grandal, presidenta del colectivo Católicas por el Derecho a Decidir, en declaraciones a medios.
"Es importante que el aborto salga del Código Penal", agregó.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunció esta semana que la falta de consenso social le había llevado a retirar una iniciativa que hubiera convertido a España en uno de los países más restrictivos de Europa para poner término a un embarazo.
El anteproyecto ahora retirado restringía los supuestos en los que una mujer podía abortar a 12 semanas de gestación en caso de violación o hasta la semana 22 si había un riesgo para la salud de la madre.
La modificación planteada ahora por Rajoy optará por cambiar el apartado que permite abortar en casos concretos a menores sin el consentimiento paterno, pero no eliminará la denominada ley de plazos.
"Hoy es un día para celebrar una conquista y la defensa de los derechos y las libertades de las mujeres que se vieron amenazadas precisamente por el tándem Rajoy-Gallardón, que quisieron recortar sus libertades con la reforma de la ley del aborto que ha sido desechada como consecuencia de la presión y movilización", dijo el secretario general del Partido Socialista, Pedro Sánchez, que estaba presente en la movilización.
La retirada del anteproyecto desató la primera gran crisis del Gobierno en España.