Por Michel Rose
PARÍS (Reuters) - El ministro francés del Interior compareció el lunes en el Parlamento para responder por la gestión de un vídeo en el que aparece un guardaespaldas de Emmanuel Macron golpeando a un manifestante, y trató de repartir culpas diciendo que pensaba que la presidencia se había encargado del incidente cuando él les informó del mismo.
El escándalo ha desatado una tormenta política y reforzado a los detractores de Macron, que le acusan de ser un presidente altivo alejado de la gente de la calle. Se trata de las críticas más duras recibidas por Macron desde que llegó al poder hace 14 meses.
El ministro del Interior, Gerard Collomb, uno de los aliados más cercanos de Macron en el Gobierno, dijo a los parlamentarios durante un interrogatorio de 2,5 horas que no tomó ninguna medida después de mostrar el vídeo a la presidencia el 2 de mayo y que le dijeron que habría un castigo.
Collomb está siendo criticado por cómo gestionó el caso y sus comentarios podrían considerarse como un intento de minimizar su propia responsabilidad, potencialmente a expensas de la presidencia.
El guardaespaldas, Alexandre Benalla, fue imputado el domingo junto con otras cuatro personas.
El periódico Le Monde publicó un vídeo la semana pasada en el que Benalla aparecía en las protestas del 1 de mayo en París con un casco antidisturbios y credenciales de policía mientras estaba fuera de servicio.
En las imágenes, se le puede ver arrastrando a una mujer y luego golpeando a un manifestante.
Collomb dijo que le habían mostrado el vídeo el 2 de mayo, el día después del incidente, que había planteado el problema en la oficina de Macron el mismo día, y que sus servicios le dijeron que el guardaespaldas sería sancionado.
"Consideré que los hechos señalados estaban siendo atendidos al nivel apropiado, así que no me involucré más en este tema", dijo Collomb a los legisladores.
Macron despidió el viernes a Benalla, jefe de su departamento de seguridad personal, pero fue criticado por no haber actuado antes. Inicialmente, había sido suspendido de empleo durante 15 días antes de volver al entorno inmediato del presidente.
Benalla aparece en muchas fotos de Reuters y en imágenes de televisión junto a Macron durante actos públicos, desde la campaña presidencial de 2017 hasta la celebración en París de la victoria de la selección francesa en el Mundial.
El líder francés no ha hecho comentarios en público sobre el caso desde que salió a la luz el miércoles pasado. La presidencia dijo el domingo que había ordenado una reestructuración de su oficina tras el incidente, aunque no dio detalles.
(Información adicional de Sophie Louet, Simon Carraud y John Irish; Editado por John Irish y Matthew Mpoke Bigg; Traducido por Blanca Rodríguez)