Por Phil Stewart y Roberta Rampton
WASHINGTON (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aprobó el envío de hasta 1.500 soldados estadounidenses a Irak, casi doblando el número de fuerzas terrestres del país para respaldar a las fuerzas iraquíes y kurdas en la lucha contra el Estado Islámico, dijeron autoridades de EEUU el viernes.
La decisión de Obama amplía enormemente el alcance de la campaña de Estados Unidos y la distribución geográfica de las fuerzas estadounidenses, algunas de las cuales se dirigen a la provincia de Anbar, duramente disputada, por primera vez como asesores.
También aumenta las expectativas de las primeras interacciones con el Congreso después de que el partido Demócrata perdiese la mayoría a favor de los Republicanos en las elecciones de esta semana.
La Casa Blanca dijo que solicitaría al Congreso 1.600 millones de dólares para un nuevo "Fondo para entrenamiento y equipamiento de Irak" y miles de millones más para operaciones contra el grupo terrorista.
El portavoz del Pentágono, el contralmirante John Kirby, dijo que esos fondos tendrían que ser aprobados antes de que las primeras fuerzas adicionales se envíen a Irak, algo que un funcionario especuló que podría pasar en sólo semanas.
"(Las fuerzas iraquíes) están en la ofensiva ahora. Y esto está diseñado para ayudarles a ser capaces de seguir haciéndolo, para mejorar su capacidad y su competencia en el campo de batalla", dijo Kirby, insistiendo en que ninguna fuerza estadounidense asumirá funciones de combate.
Alarmados por el avance de los militantes islámicos a través de Irak, Obama empezó a mandar tropas no combatientes de vuelta a Irak en verano, por primera vez desde que retiró las fuerzas estadounidenses del país en 2011.
(Información de Phil Stewart y Roberta Rampton. Información adicional de David Alexander, Julia Edwards y Patricia Zengerle. Traducido por Francisco Pazos en Madrid)