VIENA, 9 nov (Reuters) - La magnitud del fracaso de los servicios de inteligencia austriacos antes del mortal ataque yihadista de la semana pasada en Viena se hizo más evidente el lunes, cuando el Ministerio de Interior confirmó que el atacante había participado, en verano, en una gran reunión con islamistas de otros países celebrada en la capital austriaca.
Austria ha reconocido que "se cometieron errores intolerables" en el manejo de la información sobre el atacante, un yihadista convicto que el lunes pasado mató a cuatro personas en un tiroteo en el centro de la ciudad.
La semana pasada el Gobierno austriaco confirmó que el atacante había intentado comprar municiones en Eslovaquia y se había reunido con personas procedentes de Alemania y que se encontraban bajo vigilancia.
El periódico dominical suizo NZZ am Sonntag dijo, citando dos fuentes, que dos hombres arrestados en Suiza en relación con el tiroteo habían viajado a Viena entre el 16 y el 20 de julio para reunirse con el atacante.
El responsable del principal organismo nacional de inteligencia de Austria ha renunciado a su cargo a la espera de una investigación para determinar qué falló.
La inteligencia austriaca es "tradicionalmente débil y debe fortalecerse" durante la reforma del servicio que ya se está llevando a cabo, añadió Ruf.
(Información de Francois Murphy; información adicional de Michael Shields en Zúrich; editado por Gareth Jones; traducción de Jorge Martínez)