Por Pauline Mevel
PARÍS (Reuters) - El ex mandatario francés Nicolas Sarkozy fue elegido el sábado como líder del partido conservador UMP y quedó un paso más cerca de lograr una candidatura presidencial en el 2017, pese a recibir un respaldo menos convincente del esperado.
Tras perder la presidencia ante el socialista Francois Hollande en el 2012, Sarkozy regresó a la política francesa en septiembre, aunque recientes sondeos recientes han mostrado que su popularidad entre los miembros del partido opositor se está debilitando.
Sarkozy obtuvo un 64,5 por ciento de los votos. Algunos analistas habían dicho que necesitaba al menos 70 por ciento esta vez para distanciarse de sus rivales y posicionarse como el futuro candidato presidencial del UMP en el 2017.
El ex mandatario logró un 85 por ciento cuando ganó el liderazgo del partido por última vez en el 2004.
Alain Juppe, un influyente miembro del UMP que ha dicho que desea ser candidato presidencial en el 2017, decidió no retirarse de la contienda.
"Estoy dispuesto a ayudarle, por supuesto, si tomamos la ruta que he señalado, uniendo a la derecha y al centro", dijo a periodistas tras la divulgación de los resultados oficiales.
"Lo veremos en las primarias (presidenciales)", agregó.
Francois Fillon, otro potencial rival de Sarkozy para el boleto presidencial desde el UMP, tomó una postura similar.
"La unidad no significa sumisión", dijo en una declaración. "Por mi parte defenderé mis convicciones", aseveró.
Sarkozy dijo que la campaña había sido "digna" y destacó lo que según dijo fue una participación elevada, al describirla en su página en Facebook como "la mejor respuesta a dos años de disputas y divisiones internas".
En momentos en que Hollande afronta niveles bajísimos de aprobación por aumentar los impuestos y fracasar en su intento por reducir el desempleo, la oposición conservadora parece tener su oportunidad para avanzar entre los votantes franceses.
Datos económicos publicados la semana pasada mostraron que la tasa de desempleo subió a un nuevo máximo y que el gasto del consumidor se mantuvo débil.
Sin embargo, el UMP se ha visto afectado por las amargas discusiones entre sus líderes, al tiempo que su actual y ex presidente se encuentran involucrados en una investigación sobre presuntas irregularidades de financiamiento.
(Reportes de Gregory Blachier, Andrew Callus y Pauline Ades-Mevel. Editado en español por Marion Giraldo)