MADRID (Reuters) - La socialista Susana Díaz presentó el lunes el programa con el que espera seguir gobernando en Andalucía, pese a que los comentaristas políticos dicen que, en caso de ganar las elecciones autonómicas, aspirará a encabezar la candidatura del PSOE en las generales de final de año.
La presidenta andaluza dijo que en caso de ganar la cita electoral del 22 de marzo impulsaría medidas de regeneración entre las que se incluye una oficina contra la corrupción en la región, donde se ha registrado uno de los grandes casos de fraude en la Administración en las últimas décadas.
"No sólo se va a perseguir a quien cometa algún tipo de irregularidad, sino que se le va a poner muy difícil para que se acerque a los recursos que son de todos", dijo Díaz en una presentación en Sevilla.
Díaz dijo que se trataba de un ejercicio de transparencia ejemplar en una región que ha presenciado en los últimos años el goteo del culebrón de corrupción de los ERE, en el que están implicados varios ex altos cargos de la Junta andaluza.
El escándalo ha llevado también a la próxima citación a declarar como imputados de los dos predecesores de Díaz en el cargo: los expresidentes socialistas José Antonio Griñán y Manuel Chaves, que estaban al frente de los gobiernos bajo los cuales se cometió el presunto fraude a la administración.
El programa electoral del PSOE-A, en el que han participado más de 400 colectivos ciudadanos, recoge además medidas sociales en sanidad y educación, áreas muy afectadas en los últimos años por los recortes gubernamentales para atajar el elevado déficit público.
La socialista andaluza, de 40 años, planteó sin especificar medidas para la creación de puestos de trabajo "de calidad y bien remunerados" en una región que sufre un desempleo superior al 34 por ciento que afecta especialmente a los jóvenes.
"Andalucía tiene mucho que decir en esta nueva etapa de recuperación económica y en las reformas económicas responsables que necesita España y mostrar un camino diferente para superar la actual crisis y salir reforzados", recoge el programa socialista.
Entre las medidas sociales, Díaz propuso el proyecto Familia Segura para que los hijos en edad escolar tengan apoyo educativo y alimentario y un adelanto de las becas del Estado para desplazamientos y alojamientos de universitarios.
Tras romper el pacto de gobierno entre el PSOE e Izquierda Unida en enero, la presidenta andaluza argumentó la necesidad de estabilidad para adelantar un año los comicios en la región más poblada de España, en la que los socialistas gobiernan desde hace más de 30 años.
Según un sondeo de este fin de semana para El País, el PSOE ganaría con un 34,6 por ciento de los votos, frente al 22,7 por ciento del Partido Popular, pero se vería obligado a buscar apoyos para gobernar.
Díaz ha dicho que no pactará con el PP ni con la formación antiausteridad Podemos, que se sitúa en tercer lugar por delante de Ciudadanos e Izquierda Unida, relegada de tercera a quinta fuerza política tras haber apoyado al PSOE en la legislatura que ahora concluye.
La campaña electoral andaluza comienza el próximo viernes, cuando la dirigente andaluza se desplazará a Almería con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, cuyo liderazgo es cuestionado por muchos socialistas que ven con mejores ojos una candidatura a la presidencia del gobierno encabezada por Díaz.