Por Hanna Rantala
VENECIA, Italia (Reuters) - Thom Yorke produjo algunos "sonidos realmente espeluznantes" para la película de terror "Suspiria", su primera incursión en el mundo de las bandas sonoras, al igual que melodías de "tristeza y dulzura".
El líder de Radiohead siguió los pasos de su compañero Jonny Greenwood en el mundo de música para películas. Greenwood escribió la aclamada banda sonora de la película de 2007 de Daniel Day-Lewis "Pozos de ambición", y fue nominado a un Oscar este año por otra colaboración con Day-Lewis y Paul Thomas Anderson para "El hilo fantasma".
Pero para Yorke esto marcó un gran punto de partida.
"Es algo que nunca he hecho antes, ni siquiera vagamente (...) Era arriesgado", dijo a Reuters en Venecia, donde "Suspiria", una nueva versión del clásico de culto de la década de 1970, fue estrenada internacionalmente.
La película está protagonizada por Dakota Johnson, quien interpreta a una ingenua estudiante estadounidense en una siniestra academia de baile en Berlín dirigida por Tilda Swinton. Los seguidores de Radiohead reconocerán inmediatamente la voz de Yorke en los créditos de apertura de la película, acompañada por un simple fondo de piano.
"Soy yo grabando algo que no es esencialmente una de mis cosas electrónicas", dijo Yorke, cuyos dos discos solistas dejaron de lado las guitarras roqueras de Radiohead para darle paso a la música computarizada.
"Soy yo haciendo sonidos realmente, realmente, realmente espeluznantes. Pero luego hay tristeza y dulzura y se dirige a muchos sitios diferentes", agregó.
Yorke, quien tenía 23 años cuando un desconocido grupo inglés llamado Radiohead lanzó "Creep", un tema que estableció un formato en su tendencia de combinar melodías suaves con rock, cumplirá 50 años el mes próximo.
"A mi hija le encanta que diga eso", dijo Yorke entre risas. "Pienso que es muy divertido que siga haciendo lo que hago y que tenga 50 y siga asumiendo riesgos estúpidos", agregó.
Famoso por sus temas impulsados por la angustia, Yorke dijo que en realidad era una persona feliz.
"Ya sabes, estoy bien con eso", dijo el músico sobre envejecer. "Soy feliz cuando me despierto cada día, todavía estoy bien. Es así de simple", concluyó.
(Escrito por Robin Pomeroy; Editado en español por Lucila Sigal)