Por Christine Kim y Roberta Rampton
WASHINGTON/SEÚL (Reuters) - El presidente Donald Trump dijo el viernes por la noche que Estados Unidos está teniendo "conversaciones muy productivas" para reinstalar una cumbre el 12 de junio con el líder de Corea del Norte Kim Jong Un, un día después de que anunciara la cancelación del encuentro citando la hostilidad de Pyongyang.
"Estamos teniendo conversaciones muy productivas con Corea del Norte sobre reinstalar la cumbre que, si se produce, probablemente se mantenga en Singapur en la misma fecha, el 12 de junio, y, si es necesario, se extenderá más allá de esa fecha", escribió Trump en Twitter.
El portavoz presidencial de Corea del Sur comentó como respuesta que "Somos cautelosamente optimistas de que la esperanza aún está viva para el diálogo Estados Unidos-Corea del Norte. Seguimos observando los acontecimientos cuidadosamente".
Trump había indicado más temprano que la cumbre podría ser reavivada tras celebrar una declaración conciliatoria de Corea del Norte diciendo que se mantiene abierta a las conversaciones.
"Fue una declaración muy agradable la que hicieron", afirmó Trump a periodistas en la Casa Blanca. "Veremos lo que pasa. Podría incluso ocurrir el 12". "Estamos negociando con ellos ahora mismo. (...) Nos gustaría hacerlo", recalcó.
Después de años de tensión sobre el programa nuclear norcoreano, Kim y Trump acordaron este mes sostener la que sería la primera reunión entre un presidente estadounidense en el cargo y un líder norcoreano.
El plan se dio tras meses de amenazas de guerra e insultos sobre el desarrollo de misiles por parte de Corea del Norte capaces de llegar a Estados Unidos.
Trump descartó el jueves la reunión, planeada para celebrarse en Singapur, en una carta a Kim tras repetidas amenazas de Corea del Norte de retirarse del encuentro por lo que calificó como comentarios violentos de Washington por su exigencia de un desarme unilateral.
Anteriormente, el viceministro de Relaciones Exteriores de Corea del Norte, Kim Kye Gwan, dijo que las recientes críticas de su país a ciertos funcionarios estadounidenses había sido en reacción a una retórica estadounidense desenfrenada y que el antagonismo actual muestra "la necesidad urgente" de que se celebre la cumbre.
"Su anuncio unilateral y repentino para cancelar la cumbre es algo inesperado para nosotros y no podemos sino lamentarlo mucho", sostuvo Kim, quien agregó que Corea del Norte sigue abierto a resolver asuntos con Washington "independientemente de las formas, en cualquier momento".
"Incluso esperábamos que lo que se describe como la 'fórmula Trump' ayudara a despejar las preocupaciones de ambos lados y cumplir con los requisitos de nuestra parte y fuera una forma prudente de efecto sustancial para resolver el problema", dijo sin dar más detalles.
Corea del Norte había criticado duramente las sugerencias del asesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton, y del vicepresidente estadounidense, Mike Pence, de que podría compartir el destino de Libia si no entrega rápidamente su arsenal nuclear.
El líder libio Muammar Gaddafi fue depuesto y asesinado por milicianos respaldados por la OTAN después de detener su incipiente programa nuclear.