Los TIPs, o bonos de protección contra la inflación (Treasury Inflation-Protected Securities) son instrumentos emitidos por el Tesoro de Estados Unidos que se ajustan para eliminar el efecto de la inflación medida a través del Índice de Precios al Consumidor (IPC). De esta manera, los pagos de interés y de capital de los TIPs están vinculados a la inflación: suben cuando el IPC sube y bajan cuando el IPC es más bajo.
Una alternativa para tener exposición a este tipo de instrumentos es a través de fondos cotizados (o ETF por si siglas en inglés), siendo uno de los principales referentes el iShares TIPS Bond (en adelante, índice). Este fondo invierte en un índice compuesto de bonos del Tesoro protegidos contra la inflación. El siguiente gráfico muestra la evolución del índice para el período 2013 a 2015.
Las expectativas de inflación juegan un papel determinante en el valor de mercado de los TIPs y, por ende, del índice. Si bien existen varios factores que impactan e influyen en las expectativas, uno de estos factores más relevantes es la fluctuación del precio del petróleo, dado que es considerado dentro del cálculo del IPC. De esta manera, cuando el precio del petróleo baja, también lo hacen las expectativas inflacionarias y el precio de los TIPs, y viceversa.
¿Qué pasa con el precio del petróleo?
Desde mediados de 2014, el precio del crudo no ha parado de caer. El siguiente gráfico muestra la evolución de la oferta, la demanda y el precio promedio anual del petróleo crudo para el período 2013-2015.
El año 2015 terminó con una caída de 38% punta contra punta (US$37 dólares por barril a diciembre 2015 vs. US$60 dólares por barril a diciembre 2014), mientras que si se compara contra el máximo del período contemplado (US$ 94 por barril en julio 2014), la caída acumulada es de 60%.
Esto se puede explicar principalmente por la relación entre oferta y demanda. La producción en los últimos años ha estado creciendo más que la demanda, lo que generó una presión hacia la baja en los precios. Como se puede ver en el gráfico anterior, a partir de 2013 la oferta comenzó a exceder ampliamente a la demanda, acentuándose en 2015.
De acuerdo a la Agencia Internacional de Energía, la producción de petróleo alcanzó un total de 96.9 millones de barriles promedio diario al tercer trimestre 2015 (última fecha disponible) vs. 95.3 millones de barriles promedio diario al tercer trimestre 2014 (un 1.7% arriba). Recordemos que los cinco principales productores mundiales de petróleo crudo son Rusia, Arabia Saudita, Estados Unidos, China y Canadá. En particular, la producción de Estados Unidos creció significativamente en los últimos años. Comparando barriles diarios promedio de 2014 vs. el dato hasta la última fecha disponible 2015, su producción creció un 7%.
La baja en la demanda se explica por una menor demanda por parte de Europa y en cierta medida por la creciente tendencia hacía vehículos más eficientes.
¿Se van a recuperar los precios?
En el corto o mediano plazo no se observa una recuperación rápida, considerando que se sigue estimando un exceso de oferta y un crecimiento de demanda no suficientemente rápido. Además, no se espera que la OPEC tome la decisión de recortar la oferta en el corto plazo (un factor central para la recuperación de los precios) dado que, entre muchas otras razones, temen perder participación en el mercado de exportación de petróleo.
No obstante, no es seguro que estas condiciones puedan mantenerse en el largo plazo. Por esta razón, es posible que las expectativas inflacionarias de largo plazo (alimentadas en parte por la recuperación del precio del petróleo) resulten en un incremento en el valor del índice.