Recientemente hemos sido espectadores de la relección de Kuroda como gobernador al frente del Banco de Japón, a priori una buena noticia que da crédito al gran artífice de la política monetaria del país asiático de los últimos años.
Es bien sabido pues, que con su continuidad se sigue apostando por un paquete de estímulos acomodaticios que impulsen la economía en un momento crucial para el desarrollo nipón.
Además, un país que vive de la exportación, no es de extrañar que empresas como Toyota (T:7203) o Subaru (T:9632) (que presentaron este mes un incremento de las exportaciones al extranjero) hayan manifestado cierta preocupación por un yen que ha llegado a cotizar cerca de los 106 yenes por dólar americano.
También son varios informes empresariales los que han estipulado que el buen hacer de la economía nipona se vería afectada si el USD/JPY llegase a cotizar por debajo de los 105 yenes.
Todo parece indicar una devaluación del yen japonés pero, ¿qué está ocurriendo en el mundo?
Fíjese siempre en el contexto global para entender el USD/JPY. Si preguntas a un inversor nipón por su moneda seguramente te diga que si no eres de allí ¡ni la toques!. Sin duda un consejo muy acertado.
Como moneda refugio, toda corrección existente en los principales índices bursátiles es muy probable que propicie su revalorización.
Si hacemos una deducción lógica, podríamos decir que para descartar dicha apreciación, deberíamos estudiar qué está ocurriendo en los índices. Y los índices a su vez, sabemos que están sujetos en estos momentos, debido a la gran volatilidad del mercado y preocupación por el repunte de la deuda, a la rentabilidad de la renta fija. ¿Qué hay pues, de los bonos americanos y la deuda europea?
Hemos visto recientemente una corrección histórica en el DOW JONES con un bono estadounidense a 10 años rozando casi el 3%, asunto que ha preocupado y mucho a los inversores que están viendo en la posible subida repentina de la inflación como un motivo para huir a activos financieros más seguros (como los bonos mencionados). Esta es una de las razones por las que las principales bolsas están en tendencia bajista.
Si el pánico se afianza en el mercado, toda recuperación del USD/JPY quedará descartada. Es muy importante pues, saber en qué punto nos encontramos y si efectivamente, los movimientos bruscos que estamos viendo son una corrección o realmente un cambio de tendencia.
Si bien creo que las bajadas podrían continuar, es probable que la fortaleza del dólar, que también es utilizada como un activo refugio supere a la misma del yen siempre y cuando el panorama bursátil no empeore de manera drástica. El USD/JPY podría volver a alcanzar pronto el 109-110 y cualquier posicionamiento por debajo de 105 yenes por dólar lo vería como otra buena oportunidad de compra.