Finalmente se consumó la tan esperada liberación del cepo cambiario en Argentina, medida con la cual los mercados e inversores debieron convivir por más de cuatro años. Para sorpresa de muchos, las primeras ruedas sin restricciones a la compra de moneda extranjera (jueves y viernes) se vivieron sin sobresaltos, con el dólar cerrando la semana en 13,42 pesos (encuesta A3500 del BCRA), por debajo de los 14 pesos que había comenzado a operar a primera hora del jueves.
El viernes tuvo un condimento adicional, con la reanudación de las operaciones de dólar en el mercado de futuros Rofex, dónde la posición de Dólar Marzo 2016 cerró en 13,95.
Los bonos dolarizados se movieron en línea al nuevo tipo de cambio, con caídas en sus cotizaciones en pesos y subas sus cotizaciones en dólares. El riesgo país también volvió a los niveles "pre-cepo", ubicándose en 485 puntos por debajo del riesgo país de Brasil (524 puntos). Veamos como quedó la curva de bonos en dólares argentinos al nuevo tipo de cambio (13,42):
Fuente: Elaboración propia en base a datos de IAMC.
Podemos observar una notable normalización de la curva, con los bonos más cortos reflejando menor rendimiento y con hasta 300 puntos básicos de diferencia respecto a los de mayor plazo. A simple vista, el AA17 parecería estar "desarbitrado" (caro) respecto a la curva.
Adicionalmente, dada la unificación de los tipos de cambio podemos agregar la curva de bonos soberanos dollar-linked (en el gráfico a continuación) que a priori debería arbitrarse con los bonos en dólares, ya que sin restricciones a cobrar el billete dólar no representa ninguna ventaja respecto a cobrar moneda local (excepto por algunos costos transaccionales):
Fuente: Elaboración propia en base a datos de IAMC.
Sin embargo, como podemos observar los dollar-linked aún presentan un "plus" de rendimiento respecto a sus pares en dólares. Una idea de trading para arbitrar estos rendimientos sería vender AA17 y comprar AF17.
Finalmente, mostramos la curva de bonos bonos dollar-linked provinciales:
Fuente: Elaboración propia en base a datos de IAMC.
En este caso, la diferencia de rendimientos se hace más evidente, y además la curva presenta pendiente levemente negativa (incluso tomando el mismo emisor). Para aquellos inversores dispuestos a pasar de riesgo soberano a provincial, estos bonos son los que presentan mayor oportunidad en opciones dolarizadas en renta fija. Vender AA17 y comprar NDG21 (Neuquen 2018) implicaría triplicar el rendimiento manteniendo la duration.