El Banco Central Europeo (BCE) está dispuesto a utilizar “todos los instrumentos a su disposición”, incluyendo recortes adicionales en todas las tasas de interés, para asegurar que la inflación vuelva a su objetivo del 2%, dijo el jueves pasado el presidente de la institución, Mario Draghi.
El funcionario habló en una rueda de prensa después de la reunión de dos días sobre política monetaria, en la que se decidió dejar sin cambios, en el 0%, la tasa de interés y otros programas de estímulo, mientras que la de de depósitos seguirá en menos 0,4%, es decir, los bancos deben pagar para depositar exceso de fondos en el banco central.
Pero Draghi aseguró que es posible que los precios al consumidor caigan de nuevo en los próximos meses, antes de iniciar un aumento constante que continuará hasta 2017. Una buena noticia para la UE fue el dato sobre la confianza de los consumidores, que se incrementó en cuatro décimas en el mes de abril, situándose en -9,3 puntos, lo que supone la primera subida en lo que va de año. Y también resultó excelente el dato conocido el jueves pasado en los Estados Unidos sobre los pedidos semanales de subsidio por desempleo.
Durante la semana finalizada el 16 de abril cayeron a 247.000, lo que implica una caída de 6.000, siendo aquel número mejor de lo esperado por el mercado que era por un incremento a 263.000 y la cifra más baja desde noviembre de 1973.
El viernes, el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, en su visita a Londres dijo que su deseo es que el Reino Unido permanezca dentro de la Unión Europea ya que “la UE no modera la influencia británica sino que la magnifica”.
El mandatario norteamericano también advirtió que ciertos temas como el terrorismo, la inmigración y la desaceleración económica pueden abordarse mejor en conjunto, con el Reino Unido formando parte del bloque. El miércoles próximo revisarán sus políticas monetarias los integrantes del FOMC de la Fed y el jueves lo harán los funcionarios del Banco de Japón (BoJ).
Durante la semana pasada el par dólar/euro se movió entre USD 1,1220/1,1380 y al cierre del viernes en el mercado de New York cotizaba a USD 1,1224.
Argentina: cobraron los bonistas y liberan más el mercado
El ministro de Hacienda Alfonso Prat-Gay destacó el martes pasado la gran demanda que hubo en el mercado por los bonos argentinos que se utilizarán para pagarle a los holdouts, la que llegó a un total de 68.500 millones de dólares. Los acuerdos con los acreedores fueron por un total USD 9.300 millones e implican una quita del 40% de la deuda acumulada en el juzgado de Thomas Griesa. El resultado final de la colocación fue de USD 16.500 millones, unos USD 1.500 más que los previstos inicialmente.
La emisión se dividió en cuatro títulos, uno a tres años de USD 2.750 millones con una tasa de interés de 6,25% anual; USD 4.500 millones a cinco años, con una tasa de 6,875%; USD 6.500 millones a 10 años y tasa de 7,50% y el de mayor plazo, a 30 años, por USD 2.750 millones y un rendimiento de 7,625% anual. Prat-Gay informó también que la licitación tuvo una tasa promedio de 7,2% y que así "La mancha del default de 2001 se cierra definitivamente".
Y agregó: "El viernes 22, cuando se acrediten los fondos en nuestra cuenta, pagaremos 9.300 millones de dólares. Logramos 220 acuerdos con holdouts de distinto tamaño" y "conseguimos una quita del 40%". El viernes pasado, por la mañana, el Gobierno comenzó a girar los fondos para pagarles a los holdouts por un total de USD 6.200 millones a quienes firmaron un acuerdo con el Gobierno antes del 29 de febrero y otros USD 3.100 millones se giraron a un fideicomiso en el Bank of New York, para los que acordaron después de aquella fecha.
Uno de los abogados que representa a la Argentina en Nueva York, Michael Paskin, comunicó al juzgado de Thomas Griesa el cumplimiento de las condiciones pactadas para levantar las medidas cautelares, que fueron las de derogar la ley cerrojo y la ley de pago soberano, aprobar los acuerdos con los holdouts y hacerlo efectivo. Tras recibir la nota el magistrado decidió inmediatamente acceder al pedido.
Al concretarse las operaciones se sumarán a las reservas del Banco Central unos USD 7.000 millones excedentes de la suscripción de los bonos emitidos por el Gobierno este año, aunque la cifra bajará luego de que se concrete el pago de unos USD 2.500 millones a los acreedores reestructurados a partir del viernes próximo. El otro hecho trascendente de la semana pasada también ocurrió el viernes, cuando se informó oficialmente que el Directorio del BCRA había decidido abolir el cronograma de pagos de importaciones de bienes y servicios realizadas con anterioridad al 17 de Diciembre de 2015, tal como se había establecido mediante la Comunicación “A” 5850.
Ahora, al dictar la Comunicación “A” 5955, la entidad dispuso que aquéllos pagos aún pendientes “se podrán cursar con acceso al mercado local de cambios siempre que se cumplan las normas vigentes, sin límite de monto a partir del 22/04/2016”. Como antecedente positivo, hay que recordar que el viernes 8 el ente monetario había publicado la Comunicación “A” 5950, por la que eliminó el tope de USD 2 millones que regía para la compra de dólares en el mercado oficial, cuando aquéllos se utilicen para la compra de los bonos soberanos recién emitidos.
Luego de la salida de Argentina del default la política económica del Gobierno tendrá como objetivo central lograr el ingreso de inversiones para reactivar el nivel de actividad. Al respecto se espera que las primeras, que ya se están concretando, llegarán al sector financiero y luego, pero de apoco, se irán sumando las que se incorporen a la economía real. Y aquí cabe destacar que, tal como ocurrió en el mercado de cambios, los empresarios argentinos esperarán claros mensajes positivos previos, como los relacionados con la complicada situación gremial y social, el programa de "metas de inflación", la tasa de interés de referencia y otras medidas pendientes para sumarse al nuevo camino que nos llevará a la recuperación y el crecimiento.
Pero también en ese sentido juega un papel fundamental el tránsito actual en el período de ajuste de los precios relativos y el mantenimiento de altas tasas de interés para bajar la inflación. Mientras, el MULC argentino confirma que ha comenzado a crecer, habiendo operado la semana pasada un volumen total, entre entidades bancarias, de USD 2.071 millones, con un alto promedio diario de USD 414 millones, un 11% superior al del similar período anterior.
También mostró una mayor oferta, tal como se esperaba, y esa fue la razón de las poco claras intervenciones oficiales. El Banco Nación fijó su cierre vendedor de transferencia el viernes en $ 14,30 por dólar, con una mejora del valor de nuestra moneda, en las cinco últimas jornadas, del 1,8%. Cabe destacar que el BCRA habría comprado el lunes y martes pasados en el mercado un total de unos USD 231 millones, habiendo sumado también, según trascendió, fondos que le cedieron el Banco Nación y el Banco de la Provincia de Buenos Aires.
Es necesario, lo reiteramos, que al respecto el ente monetario debe informar diariamente con el detalle y la exactitud que corresponde. Las reservas del BCRA quedaron el viernes sumando, según dato provisorio, USD 30.845 millones, mostrando un aumento de USD 6.606,2 millones.