El retroceso del EUR/AUD, después de quebrar soportes horizontales importantes y una línea alcista, tuvo el primer freno apenas por debajo de 1,4800. Tras marcar mínimos en 1,4778, regresó por encima de 1,4800 y siempre se mantuvo por encima.
Una señal de regreso de las presiones bajistas será un cierre por debajo de 1,4800, lo que podría hacer que se retomen los recorridos en dirección al sur.
Por ahora, el cruce esta consolidándose tras la caída. El momento de largo plazo sigue siendo bajista, aunque pasada la decisión del banco central de Australia, habrá que ver si el Banco Central Europeo deja que el euro vaya libre en el mercado y no lo impulse con las palabras de Mario Draghi. Una subida sobre 1,5000 sacaría las presiones bajistas. No es que sea la intención de Draghi haga subir al euro, sino que a veces lo que él diga puede impulsar a más compradores o vendedores.
Recordemos que el cruce está formando una especie de hombro cabeza hombro, que de materializarse, implica que hay más caídas por delante.