- Las acciones podrían mantener sus ganancias desde el informe de empleo de mayo
- El mercado de renta variable podría caer o repuntar ante la reunión del FOMC el miércoles
- La cuña ascendente del S&P parece estar en riesgo
A pesar del rango intrasemanal visto la semana pasada que ofreció algo tanto a los alcistas como a los bajistas desde una perspectiva del trading a corto plazo, el mercado de renta variable de EE.UU. en mayor medida cerró la semana plano en lo que respecta al rendimiento, todo ello antes de que conozcamos este próximo miércoles la decisión del FOMC sobre su política monetaria y los tipos de interés.
A finales del mes de mayo empecé a comentar que los catalizadores de más corto plazo potencialmente moderados, y por ende, catalizadores marginalmente alcistas en el horizonte, se basaban en el informe de empleo de EE.UU. de mayo que vio la luz el 5 de junio, así como la reunión del FOMC de este miércoles.
Desde el informe de empleo de mayo las acciones están, por un lado, manteniéndose y, por otro, más o menos sin cambios en lo que respecta al S&P 500.
Dada la importancia de la declaración del FOMC del miércoles, me van a permitir poner el escenario en perspectiva. Los inversores están bastante dispersos a día de hoy en función de las expectativas de una subida de los tipos de interés en EE.UU. y si algunos esperaban una subida tan pronto como esta semana, otros no esperan un repunte hasta septiembre o diciembre, incluso hay quien ni si quiera lo espera para este año.
No obstante, la realidad es que los tipos de interés han subido de forma considerable desde el pasado mes de enero, lo que quiere decir que, al menos, un repunte marginal en los tipos ya está descontado por el mercado. Otros de los aspectos clave que debemos tener presente son que:
a) El dramático aumento de la oferta de bonos en los últimos años, junto con una menor liquidez está provocando dificultades en los mercados de renta fija y, b) que dejar atrás un contexto de tasas próximas al 0% es diferente a un repunte de los tipos en medio de un ciclo de tipos de interés.
Por todo ello, este miércoles, Janet Yellen, presidenta de la Fed de Estados Unidos, puede centrarse en que los datos económicos garanticen un repunte de los tipos ahora o que mantenga lo que ha asegurado durante todo el año aludiendo a que son dependientes de los datos. Lo más probable es que las acciones caigan de forma generalizada en el primer caso y repunten en el segundo.
Un tercer resultado posible podría basarse en que el lenguaje de Yellen durante la rueda de prensa transmita a los inversores que no se llevará a cabo un alza de las tasas hasta finales de 2016, lo que podría complizar las cosas para el mercado de renta variable a corto plazo, ya que indicaría que el crecimiento económico "apesta", pero aún tenemos a la Reserva Federal en una postura "acomodaticia".
Desde de una perspectiva de la gestión del riesgo, y habiendo visto y escuchado más confusión por parte de inversores institucionales y privados durante la semana pasada, he reducido mis posiciones largas y es probable que recaude más dinero aún antes de la reunión del FOMC del próximo miércoles.
Mi caso base mantiene que, incluso si vemos un mayor rally en la renta variable a corto plazo, desde una estructura cíclica, así como desde una perspectiva técnica, las acciones se están preparando para una mayor corrección en algún momento de cara a los próximos meses para que cualquier acto posterior a la FOMC probablemente sea un último "hurra". Si nos centramos en el aspecto técnico, observando el gráfico del índice multi-anual del S&P 500, desde los mínimos de 2009, podemos ver que después de superar sus anteriores máximos históricos de 2007 en 2013, el rally continúa en línea recta.
No obstante, en enero, el índice finalmente alcanzó la extensión crítica del 61,80% de Fibonacci de todo el rally de 2009-2013, una zona de medida técnica donde empiezan muchos activos a hacer una pausa, al menos por un tiempo. Desde esta perspectiva, tendría sentido que el índice comenzara una mejor fase de corrección a medio plazo.
Fuente: Saxo Bank
Si observamos el índice S&P 500 más a corto plazo, podemos ver que la formación de la cuña ascendente, es decir, el lento y bajo momentum se está moviendo al alza en el índice en los últimos seis meses.
Los niveles de soporte de corto plazo que debemos vigilar son los 2.065 puntos, cuya ruptura por debajo de esta zona nos llevaría hacia niveles de 2.000 puntos. Del lado alcista, los máximos de la semana pasada cerca de los 2.115 puntos son ahora resistencia, que en caso de superarse, podría llevar al índice hacia los 2.150 puntos.
Dado que el gran foco de esta semana se centra en la reunión del FOMC, voy a mantener mi análisis sobre el S&P 500 y, por lo tanto sobre el mercado en general, porque en todos los escenarios post- FOMC, creemos que la correlación entre acciones seguramente repunte. Es decir, seguimos enfocados mejor en el mercado en general que en las acciones individuales.
Fuente: Saxo Bank