El frenético año 2020, marcado por la volatilidad y un raudo mercado bajista, exacerbó la agitación de muchos inversores; incluso la fuerte recuperación posterior no ha conseguido calmar del todo los nervios de algunos inversores. Sin embargo, según Fisher Investments España, es improbable que se aproxime un mercado bajista (una caída prolongada del mercado superior al 20%). En el presente artículo se detallan las razones por las que mantenemos un enfoque optimista sobre el ciclo alcista en curso y los factores fundamentales que sustentan la recuperación actual.
Pocas evidencias de una inminente recesión económica
Los mercados bajistas, por lo general, van de la mano de las recesiones económicas. Sin embargo, la típica recesión económica no se materializa repentinamente, por lo que los inversores tienen tiempo de sobra para buscar signos que apunten a una posible recesión. Actualmente, Fisher Investments España ve pocos indicios que sugieran una desaceleración económica que pueda arrastrar la economía mundial hacia una recesión.
Aunque es probable que el crecimiento económico continúe a lo largo de 2021, no creemos que sea un signo de una economía sobrecalentada a punto de entrar en recesión. Las restricciones impuestas a causa de la pandemia han dejado una demanda reprimida que ha comenzado a evidenciarse en este 2021. Pero no hay que dejarse llevar por la idea de que esta demanda pueda desencadenar un escenario de crecimiento económico desorbitado. La liberación de una demanda reprimida es una fuerza poderosa, pero no indefinida en el tiempo. Es muy probable que los consumidores vuelvan rápidamente a la rutina que tenían antes de que se impusieran los confinamientos y otras restricciones.
Esto significa que el crecimiento económico tras la pandemia probablemente acabe pareciéndose al crecimiento observando en senda precoronavirus. Prevemos que la economía mundial crezca más rápido en este 2021, a medida que se levanten los bloqueos económicos y las condiciones generales vuelvan a la normalidad. Sin embargo, esperamos un retorno a un crecimiento moderado en 2022 y años venideros, lo que debería ser un factor positivo para la renta variable.
Optimismo racional, no euforia generalizada
El célebre inversor Sir John Templeton definió la evolución del sentimiento inversor a lo largo de los mercados alcistas como sigue: «Los mercados alcistas nacen en el pesimismo, crecen en el escepticismo, maduran en el optimismo y mueren en la euforia». En otras palabras, los inversores suelen buscar signos de euforia en los mercados para tratar determinar la formación inminente de un mercado bajista. Si bien observamos signos de creciente optimismo y algunos focos aislados de euforia, no parecen ser un peligro para el mercado alcista actual.
El escepticismo y el pesimismo prevalecieron a mediados de 2020, pero vemos probable que los signos de optimismo generalizado, que empezaron a brotar a finales de 2020, continúen creciendo a lo largo de 2021. La incidencia de coronavirus sigue siendo elevada en muchas partes del mundo, por lo que los confinamientos se siguen reimponiendo o levantando de acuerdo con la evolución de la situación epidemiológica en cada país. Pero, a diferencia de la reacción que provocaron las primeras restricciones del pasado año, los inversores y analistas parecen estar adoptando una visión más optimista sobre el largo plazo de lo que podría pensarse dada la situación. Por ejemplo, tras el suelo del mercado bajista del mes de marzo de 2020, la encuesta de la Asociación Americana de Inversores Individuales (AAII) mostró que el número de inversores pesimistas superaba con creces a los optimistas cada semana hasta mediados o finales del mes de octubre. No obstante, el optimismo ha prevalecido desde entonces y las primeras lecturas de 2021 muestran que los optimistas sobrepasan a los pesimistas en 27 puntos porcentuales.[i] En lugar de interpretar estos datos como un preludio de una catástrofe inminente, parece que los inversores en renta variable están teniendo en cuenta el avance de los programas de vacunación y la vuelta a la normalidad a lo largo del año.
A nuestro juicio, ese optimismo, que no llega a la euforia, es racional. Gracias al progresivo aumento del número de inoculaciones, se puede avistar cada vez más la vuelta a la normalidad de la actividad económica. Además, no observamos una expansión masiva de la oferta de acciones a nivel mundial (cuyo fenómeno podría sugerir que los inversores están al borde de la euforia). Si bien el número de salidas a bolsa ha repuntado, las recompras de acciones han mantenido bajo control el crecimiento de la oferta de acciones mundial. Asimismo, la calidad de los nuevos debuts en bolsa actualmente es bastante buena. Por lo tanto, no observamos una proliferación de salidas a bolsa de empresas sin beneficios, lo que podría ser un signo de que los inversores han perdido la cabeza.
En nuestra opinión, este entusiasmo de los inversores todavía puede seguir creciendo en 2021, lo que es un factor positivo para la renta variable en el futuro inmediato. No creemos que los mercados estén en territorio eufórico, pero los inversores deben seguir de cerca la evolución de las expectativas para determinar si el listón se encuentra por las nubes. El optimismo a menudo evoluciona a fuego lento durante un tiempo antes de convertirse en euforia. Muchos de los mejores años en bolsa tienen lugar cuando el sentimiento inversor aumenta en los últimos compases del mercado alcista. Si bien es cierto que estamos alerta ante la aparición de posibles excesos en algunas áreas del mercado, creemos que es demasiado pronto para salir del mercado, dado que esa suele ser una de las fases más fuertes de los mercados alcistas y, por lo tanto, se correría el riesgo de percibir las rentabilidades asociadas a este sólido desempeño.
Escasas probabilidades de que se produzcan cambios legislativos de gran calado
Los cambios legislativos son otro factor que Fisher Investments España vigila de cerca. La historia demuestra que los cambios legislativos de gran calado pueden crear incertidumbre y alterar sustancialmente los planes de las empresas. Es probable que el bloqueo legislativo generalizado que prevalece actualmente mantenga a raya las probabilidades de que se produzcan cambios regulatorios importantes. Es importante señalar que no estamos a favor de ningún político o partido . Analizamos los acontecimientos políticos y las noticias únicamente para sopesar el impacto potencial que estos eventos puedan tener en los mercados.
En nuestra opinión, la renta variable tiende a mostrar un mejor comportamiento cuando disminuye la incertidumbre. Si bien cualquier situación de parálisis política resulta frustrante para los votantes, contribuye a reducir la incertidumbre general al dificultar la aprobación de cambios legislativos o reglamentarios de gran envergadura. De cara a 2021, creemos que la situación política actual podría ser una razón para ser optimistas en muchas regiones.
En EE.UU., las exiguas mayorías con las que cuentan los demócratas en ambas cámaras del Congreso probablemente consoliden el estancamiento legislativo que tiende a aparecer en las elecciones de mitad de mandato. Aunque cuenten con una agenda ambiciosa y una fuerte determinación procesal, es improbable que los demócratas consigan aprobar cambios legislativos radicales sin antes suavizar dicha legislación con el objeto de satisfacer a los miembros más moderados del partido. En el Reino Unido, el fin del camino hacia el Brexit extinguió los últimos focos de incertidumbre política. La salida de Europa más tranquila de lo que previamente se había esperado ha servido de ayuda a los inversores, y no vemos nada en el horizonte que tenga la misma fuerza que el Brexit para tambalear los mercados. En los principales mercados europeos, la parálisis legislativa también parece ser el escenario más probable, lo que da luz verde a las bolsas para seguir creciendo en 2021.
No cabe duda de que habrá baches en el camino, pero creemos que los inversores largoplacistas deberían disfrutar de lo que podría ser un gran 2021. La volatilidad o las correcciones (caídas bruscas impulsadas por el sentimiento inversor de entre el 10 % y el 20 %) pueden frenar el avance del mercado en cualquier momento, pero creemos que los inversores deberían mantener la mente fría y seguir invirtiendo para beneficiarse de lo que Fisher Investments España espera que sea, por lo general, un mercado fuerte y alcista. Las correcciones se producen en algunos de los mejores años de las fases tardías del ciclo bursátil, como ocurrió a finales de la década de los 90. Fisher Investments España cree que este es un año en el que hay que evitar los errores de inversión provocados por las emociones, como el miedo o la codicia. Por el momento y con estos datos, si necesita obtener una rentabilidad similar a la de la renta variable en el largo plazo, vemos fundamental mantener la disciplina y la diversificación con el fin de alcanzar sus objetivos de inversión.
[i] Fuente: Encuesta sobre el sentimiento inversor realizada por la Asociación Americana de Inversores Individuales (AAII), a 12/1/2021. Resultados de la encuesta semanal, del 26/3/2020 al 7/1/2021. www.aaii.com.