Caídas a estas horas en las bolsas europeas, de nuevo, muy basadas en los resultados empresariales que hemos conocido, y que están condicionando mucho el comportamiento de algunos sectores. El bancario, el de recursos básicos y el de constructoras están entre los más bajistas de la sesión.
Y es que las cuentas presentadas por Santander (MC:SAN), Deutsche Bank (DE:DBKGn) y Barclays (L:BARC) no han gustado nada al mercado, especialmente, las del banco alemán.
Tampoco han sido positivos las de las aerolíneas Air France (PA:AIRF) y Lufthansa (DE:LHAG), ni los de petroleras como Royal Dutch Shell (L:RDSb) o Eni (MI:ENI).
Mejor sabor de boca han dejado las de compañías tecnológicas como Nokia (HE:NOKIA). También han sido positivas las de Bayer (MC:BAYG). En España, han gustado especialmente las de Mediaset (MC:TL5).
Al margen de las cuentas corporativas, tenemos cierta resaca de las conclusiones tras la reunión de la Fed en el día de ayer. La Autoridad Monetaria mantuvo los tipos de interés tal y como se preveía, y dejó plasmado en su comunicado un mensaje no muy novedoso, marcado por la ambigüedad y el equilibrio.
Tal vez, lo más destacable fue que eliminó la mención de los peligros crecientes en el ámbito internacional, asunto que sí que destacó en la reunión de septiembre. Por otro lado, tan sólo uno de los 10 miembros del FOMC votó a favor de subir tipos, al igual que ocurrió en septiembre.
Las conclusiones no varían demasiado de las sensaciones que existían antes. Si acaso, el hecho de no incorporar nuevas figuras retóricas que apunten a un retraso de la subida de los tipos, hacen que ésta sea más posible en diciembre.
Así lo recogió el mercado, pues los futuros sobre fondos federales aumentaron las posibilidades de que la subida se acometa en diciembre, pasando de un 38% a un 43% de posibilidades descontadas.
La reacción inicial de Wall Street estuvo marcada por una gran volatilidad, que trajo caídas iniciales y subidas posteriores, para cerrar con ganancias del 1,18% para el S&P500, que se acercó mucho a los 2.100 puntos, y del 1,3% para el Nasdaq.
También tuvo cierta influencia la fuerte subida de Apple (O:AAPL) tras presentar sus resultados un día antes, y de las compañías energéticas, que se aprovecharon de un fuerte repunte del petróleo.
Tras el cierre, los futuros sobre índices estadounidenses comenzaron a caer, y a esta hora apuntan a una apertura claramente negativa. En Asia, la sesión ha sido bastante tranquila. El Nikkei ha repuntado un escaso 0,17%, y la Bolsa de Shanghái lo ha hecho un 0,4%.
La agenda de datos macro del día nos ha dejado un dato de paro en Alemania del mes de octubre mejor de lo esperado, y un IPC de España preliminar en octubre del -0,9%, por debajo de lo previsto. También tenemos datos de confianza de la Eurozona, que tienden a ser positivos.
En EE.UU. esta tarde se publicarán las peticiones semanales de desempleo, el PIB tercer trimestre adelantado y el consumo personal a las 13:30 horas, y las ventas de viviendas pendientes septiembre a las 15:00h.
En empresas, conoceremos los resultados de Mastercard (N:MA), Time Warner (N:TWX), Coca-Cola (N:KO), LinkedIn (N:LNKD), US Bancorp (N:USB) y Starbucks (O:SBUX).
En el mercado de divisas, tenemos más caídas en el EUR/USD tras el comunicado de la Fed de ayer, ya por debajo del 1,10. El billete verde hizo una interpretación más clara que la renta variable de las intenciones de la Fed, descontado con más intensidad la subida de tipos.
El oro cayó con fuerza tras el comunicado de la Fed (en paralelo a la apreciación del dólar), y ahora se sitúa sobre el soporte de 1,160 dólares.
En resumen, la principal cita de la semana, la reunión de la Fed, no ha influido demasiado en el sentimiento inversor, al no despejar ninguna duda. Los resultados empresariales publicados se están apoderando de las cotizaciones, en un movimiento que sigue siendo de consolidación.