El ISM manufacturero de Estados Unidos, con un crecimiento casi nulo en enero, marcó el ritmo de los mercados el lunes.
La nota principal la dio, entre las acciones, el índice Dow Jones, que cayó fuerte en el momento de los anuncios, aunque también lo hicieron los futuros del índice Nikkei 225 (le dio fuerza al yen), y de los principales índices europeos.
Sin embargo, aparecen otros factores como clave para entender esta baja de las acciones principales de Wall Street, en un movimiento que no conoce antecedentes prácticamente desde la crisis desatada en 2008.
Existe una clara salida de capitales de los países emergentes, que ven de este modo caer sus monedas a gran velocidad, y que generan un desequilibrio importante en sus respectivas economías.
De alguna forma esto estaba previsto, toda vez que la Fed anunció que sus planes de estímulo comenzarían a ser recortados en un plazo corto. Pero llegado el momento, la ola de pánico se apodera de los ánimos en los mercados. Esto, sumado a que se termina la fiesta del dólar barato tanto en esos países como en las bolsas, está impactando de lleno en los papeles, y en forma no tan dura, pero visible, en las monedas.
Así, el yen llegó a 100,75, siguiendo los pasos de un índice Nikkei que presenta en estos días su cara más negativa. La moneda nipona recién se desinfla en estas horas, aunque solo la superación de 101,65/70 le dará fuerza al dólar para buscar la zona de 103/104 en los próximos días.
A la fortaleza del yen le contrasta la debilidad del euro y la libra Esterlina. Si bien la moneda única respetó el soporte de 1,3475/80, y gana algunas posiciones en la sesión europea del miércoles, su baja de la víspera sumada al crecimiento del yen, llevó al par EUR/JPY a recorrer más de 170 puntos el lunes.
Algo similar sucede con el par GBP/JPY, cuyo movimiento bajista se hizo muy veloz y extenso en puntos. Ello pese a que la libra no pudo aprovechar un buen PMI de la construcción, que mostró cifras mejores de las esperadas.
Impera, entonces, un clima de incertidumbre en los mercados, esperable en estas primeras semanas de ayuda "recortada" por parte de la Fed, y que puede extenderse a las próximas semanas.
Esta no fue la mejor bienvenida por parte de los mercados para Janet Yellen, nueva presidente de la Reserva Federal, quien asumió su cargo el lunes reemplazando a Ben Bernanke. De todas formas, ha sigo más benigna que el 6 de mayo de 2010, cuando misteriosamiente, en un episodio nunca aclarado, el Dow Jones cayó más de 1000 puntos en minutos, en un "aviso" que los mercados le dieron a Bernanke en ese momento.