La paciencia puede definirse como la actitud de saber esperar, incluso podemos llevarlo más allá y decir que es el ARTE de saber esperar para conseguir algo beneficioso. Digo arte pues en los tiempos que corren, donde los jóvenes apenas soportan vídeos de pocos minutos antes de pasar al siguiente, aprender a esperar, con el fin de obtener un beneficio mayor, se me antoja algo de artistas.
La paciencia tiene mucho que ver con vivir el ahora, centrarnos en el momento que vivimos y disfrutarlo. Si estamos pensando continuamente en lo que nos aguarda el futuro es porque somos impacientes y esta actitud suele traducirse en insatisfacciones, pues idealizamos lo que nos depara la vida y cuando se materializa no lo disfrutamos, pues ya estamos pensando en lo siguiente.
Es por todo esto que considero LA PACIENCIA como una de las virtudes más importantes para alcanzar el éxito en el trading.
La paciencia del trader ha de acompañarlo y ha de cultivarse desde el principio de su carrera y no solo en su operativa. Por esto podemos ver la necesidad de paciencia desde dos puntos de vista, en función del momento en el cual el trader se encuentre: Durante el período de formación y durante la operativa.
Período de formación
Un trader, para llamarse así, ha de pasar antes por un duro período de formación. Quien crea que, con un curso, tres o cuatro libros descargados de internet y cincuenta operaciones más o menos exitosas en simulado tiene suficiente, se equivoca. La paciencia del trader ha de comenzar a labrarse en su período de formación. ¿Qué nos hace pensar que podemos dedicar 6 meses a la preparación de una de las profesiones más exigentes que existen y tener éxito?
Lamento ser un tanto negativo, pero las dosis de realidad en este mundillo vienen bien y ahorran dinero. Conste que no estoy diciendo que no se pueda conseguir, estoy diciendo que debemos ser PACIENTES y recorrer el camino sin tomar atajos y sin tirar la toalla a la primera dificultad o al primer revés. La preparación teórica y práctica ha de ser completa y las horas a invertir en este proceso, puedo dar fe, son muchísimas. Habrá personas que se puedan capacitar antes y otras que tarden más, pero, en cualquier caso, olviden las promesas de poco trabajo y mucho dinero que puedan oír en los anuncios de cursos milagrosos.
Es difícil saber cuánto tiempo se va a tardar en estar totalmente capacitado para operar con unas mínimas garantías, por un motivo muy sencillo: la parte emocional que ha de ser dominada por cada persona es impredecible y única. A esto, por si fuera poco, se añade una dificultad que es la cantidad de “vendedores de mapas del tesoro” y de libros poco útiles con los que podemos perder nuestro valioso tiempo y nuestro dinero.
Paciencia durante la operativa
Tras un adecuado período de formación y teniendo un plan de trading ya podemos comenzar a operar. ¿Dónde entra en juego la paciencia durante la operativa? En ver cómo se forma una operación. Trazar una estrategia tanto para entrar como para salir. Esperar a que el precio alcance el punto de entrada y las condiciones que deben darse para “apretar el gatillo”. Saber esperar hasta que estas condiciones realmente se están produciendo es algo que se debe entrenar mucho. Un error usual que causa la impaciencia las primeras veces que alguien se enfrenta al gráfico es operar en base a lo que creemos va a suceder y no en base a lo que realmente está ocurriendo en el momento actual. Se pretende cambiar la lógica de lo aprendido por ilusorias artes adivinatorias.
No debemos intentar adivinar lo que hará la siguiente vela, primero porque eso no es posible y segundo porque la siguiente vela hará lo que le dé la real gana y nuestro trabajo no consiste en adivinar nada si no en actuar en base a un cálculo de las probabilidades de que un determinado hecho vaya a ocurrir, basándonos en patrones de velas, procesos matemáticos (indicadores), volumen, rupturas de zonas de soporte o resistencia, etc. Hay que recordar siempre que el trader trabaja en base a lo que tiene a su izquierda en el gráfico, lo que hay a la derecha es la nada.
Parece lógico, obvio e incluso fácil de hacer, ¿verdad? Pues no lo es. Cuando estás frente a la pantalla y piensas que cada tick que pasa por delante de ti es dinero, cada vez te cuesta más frenar tu deseo de participar. Eso es impaciencia y debemos dominarla. Algo que puede ayudarle a controlar esto es dejar de pensar en términos monetarios.
No cuentes dinero mientras operas, no pienses en cuanto dinero has ganado o perdido. Cuenta puntos y restarás ansiedad, al ser los puntos algo indeterminado sin un signo del dólar detrás. Se puede hacer la prueba poniendo en su plataforma el resultado de la operación en puntos, porcentaje o dinero. Compruébelo cuando esté en medio de una operación. Pone mucho más nervioso ver subir y bajar cifras con el símbolo del dólar que puntos.
En resumen, hemos de tener la paciencia necesaria primero para formarnos adecuadamente y después para esperar hasta que veamos el patrón con más alto porcentaje de posibilidades de darnos una operación correcta según nuestro plan de trading. Recuerde el lector que más de una vez se escapará el precio a la espera de un patrón correcto, pero el precio siempre vuelve a dar nuevas oportunidades.
El buen trader es aquel que sabe cuándo no operar, que sabe mirar la pantalla y mantenerse al margen. Recuerde esto: No operar también es operar. Cuanto más nos ciñamos a nuestro plan de trading menos errores cometeremos. Y para eso hace falta PACIENCIA.