Los mercados bajan pero no hay ventas: ¿Quién tiene razón?

Ayer fue una jornada negativa, con los principales índices estadounidenses bajando entre un 2% y un 3%, incluidos el S&P 500, el Nasdaq Composite y el Dow Jones Industrial Average.

Una vez más (repasemos el análisis de ayer para racionalizarlo) los inversores buscan otra justificación para el descenso del día. Sin embargo, a estas alturas es bastante evidente que desde principios de año estamos dentro de un mercado bajista en todas las principales clases de activos, pero queriendo como siempre ir informando de algunos números más, hay diferencias entre los distintos descensos.

Una de ellas, la que diferencia, por ejemplo, el mercado de valores del mercado de criptomonedas, radica en los flujos y los volúmenes de negociación.

En las dos imágenes de abajo, he reportado gráficamente lo que dije arriba, en el sentido de que podemos ver inmediatamente que mientras que para las criptodivisas (primera imagen) efectivamente ha habido una fuerte salida de dinero, no se puede decir lo mismo para el mercado de valores (segunda imagen, línea azul).

Ahora bien, el escenario que los mercados podrían estar valorando, el de una posible recesión, podría suponer (según Mike Wilson, estratega jefe de renta variable estadounidense de Morgan Stanley (NYSE:NYSE:MS)) un escenario del S&P 500 en torno a los 3000 puntos. Traducido, una caída global del 37% desde los máximos, así como otra del 20% desde los valores actuales.

Pero, de nuevo, hay que ponerlo en contexto y entender que históricamente, si 2022 (admitámoslo) terminó con una caída del 37%, estaría "en el podio" de los peores años de la historia. Es posible, pero quizás no tan probable.
Repito, en cualquier caso, aunque se diera este escenario, en el momento en que me ponga a invertir el efectivo residual en base a ciertas detracciones, teniendo un horizonte de unos cuantos años por delante para absorber cualquier otra caída peor, el problema no se planteará.

Concluyó con un resumen de Michael Burry (famoso por "la gran apuesta" en 2008), según el cual el mercado (que para los que no lo saben es un indicador adelantado, siempre se anticipa a todo) alcanza de media un mínimo de 116 días antes del mínimo de la Economía. Así que asumiendo que pronto podríamos encontrarnos en una recesión, suponiendo de nuevo como peor escenario una cartera que tenga en cuenta una caída del 35-40% y que dure hasta final de año, creo que ya podemos entender gran parte del daño que podría producirse en los mercados.
Si, por el contrario, esto no ocurre, porque los mercados en la segunda mitad de 2022 se recuperan, pues mejor, porque ya estoy posicionado y ya he "ajustado" mi cartera en los últimos meses para un eventual reinicio.

La clave de todo es siempre la planificación.

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"Este artículo se ha redactado únicamente con fines informativos; no constituye una solicitud, oferta, consejo o recomendación para invertir como tal y no pretende en modo alguno fomentar la compra de activos. Me gustaría recordarles que cualquier tipo de activo, se valora desde múltiples puntos de vista y es altamente arriesgado y por lo tanto, cualquier decisión de inversión y el riesgo asociado sigue siendo de ustedes."