Este artículo se publicó en inglés el día 9 de mayo de 2019
Ellen R. Wald
Los dos temas predominantes que afectan ahora al mercado del petróleo parecen ser el estado de las negociaciones comerciales de Estados Unidos y China y las reservas de petróleo de Estados Unidos. Sin embargo, los traders no deberían perder de vista la producción de petróleo de Arabia Saudí y sus planes de exportación para mayo y junio, ya que éstos afectarán al equilibrio de la oferta y la demanda mucho más significativamente en las próximas semanas y meses.
Durante la noche del domingo y la mañana del lunes, los precios del petróleo descendieron cuando parecía que las conversaciones comerciales entre China y Estados Unidos se iban al traste, lo que a su vez suscitó nuevamente los temores de que la actual guerra comercial llevará a una recesión y que la demanda de petróleo caerá como resultado.
Este tipo de movimiento del mercado es el resultado de que los traders actúan basándose en su percepción de cómo reaccionarán otros traders y algoritmos. Realmente no es una reacción a una posible recesión económica, ya que esa ralentización no se vislumbra en un horizonte inmediato, aunque finalmente se materialice. Tras una breve recuperación el lunes, los precios volvieron a caer el martes pues temores similares se hicieron con el mercado. Apenas dos días después, el miércoles por la mañana, los precios del petróleo subieron pues las expectativas de un acuerdo comercial entre Estados Unidos y China parecían ganar fuerza.
Los datos semanales de la Administración de Información Energética sobre las reservas de Estados Unidos también han tenido su impacto en los precios durante las últimas semanas. La semana pasada, las cifras de la AIE indicaron un gran aumento de las reservas de petróleo y los precios cayeron. Esta semana, mostraron un inesperado descenso, y los precios del petróleo subieron un poco.
Sin embargo, si miramos la oferta global, estos factores deberían quedar eclipsados por las noticias de Arabia Saudí y Aramco. La pregunta del millón es si Arabia Saudí aumentará la producción y las exportaciones para reemplazar el petróleo iraní que dejará de entrar al mercado debido al endurecimiento de las sanciones de Estados Unidos. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el Departamento de Estado han dicho que Arabia Saudí aportará más petróleo al mercado, pero el país de Oriente Próximo ha dicho repetidas veces que sólo actuará para aumentar la producción en respuesta a la demanda de los clientes.
Ahora que van llegando los pedidos de envíos para junio, podemos hacernos una mejor idea de cómo va tomando forma esto. Según Energy Intelligence, Arabia Saudí planea producir entre 10 a 10,3 millones de barriles al día en mayo. Este aumento, sin embargo, se debe principalmente al aumento de la demanda interna de petróleo y gas del Reino, a media que aumenta la temperatura y sube la demanda de electricidad, especialmente durante este mes del Ramadán
Arabia Saudí no tiene planes de aumentar sus exportaciones muy por encima de su cifra de abril de 7 millones de barriles al día. Un funcionario ha afirmado que el país ha recibido pedidos de petróleo para el mes de junio de clientes que antes importaban petróleo iraní y que todos estos pedidos serán atendidos manteniendo la cuota de producción de 10,3 millones de barriles al día del Reino. De hecho, Arabia Saudí tiene la intención de mantener sus exportaciones en menos de 7 millones de barriles al día en junio, una cantidad relativamente baja. Aramco también subió los precios del petróleo que vende a los clientes asiáticos a partir de junio. Todo esto son indicios de que deberíamos esperar un ajuste del suministro de petróleo de mayo y junio.
Arabia Saudí ha dejado claro que sólo está dispuesto a suministrar más petróleo a los antiguos clientes de Irán si están dispuestos a pagar más. Estos clientes llevan tiempo comprando petróleo iraní a precios más baratos y recibiendo además descuentos en las cuotas de envío y seguro. A menos que los clientes estén dispuestos a incumplir las sanciones de Estados Unidos sobre el petróleo iraní, los precios del petróleo saudí subirán. Los traders deberían esperar a comprobar si eso se refleja en el mercado.
Eso no afecta a otros factores que lastran el suministro de petróleo, como el descenso de la producción venezolana, la inestable producción de Libia y el reciente episodio de contaminación de petróleo de Rusia. Para concluir, a pesar de que las noticias del mercado petrolero están encabezadas por las confusas actualizaciones de las relaciones comerciales entre Estados Unidos y China y por los altibajos semanales de las reservas de Estados Unidos, los traders deberían estar atentos a una posible crisis de suministro, especialmente en Asia.