El pasado lunes se efectivizó el pago del Boden 2015 (RO15) por 5.899 millones de dólares. Este instrumento había sido emitido a fines de 2005 en el marco del Programa de Reordenamiento Financiero, bajo ley Argentina, con un interés del 7% anual y plazo a 10 años.
Tras el pago del Boden 2015, las reservas externas del BCRA cayeron 4.749 millones de dólares, ubicándose en USD 27.722 M (datos al 6-10-2015). Con la intención de recomponer parte de las reservas el gobierno llamo a licitación del Bonar 2020, con el que logró conseguir USD 637 millones al 9,2% anual.
Fuente: Elaboración propia en base a datos de BCRA
A pesar de la fuerte caída en las reservas, en el mercado local el pago del Boden 2015 ha tenido un efecto positivo sobre las cotizaciones en dólares de los bonos argentinos (en particular los de tramo corto y medio de la curva). Resulta evidente que al menos una buena parte de los dólares que recibieron los tenedores del Boden 2015 esta siendo reinvertida en el mercado local. Si bien en los mercados internacionales las cotizaciones se mantuvieron firmes tras el pago, las subas fueron mucho más tímidas comparadas con las del mercado local.
Fuente: Elaboración propia en base a datos de Bolsar
No cabe dudas que tras el pago del Boden 2012, el Boden 2015 ha sido el bono más representativo y más negociado de los bonos soberanos. A una semana de haber cotizado por última vez, veamos las alternativas que quedaron tras su pago:
- En los bonos cortos, el "sucesor" por naturaleza del Boden 2015 es el Bonar X - (AA17). El mismo ofrece un rendimiento aproximado de 8% en dólares con una duración de 1,3 años. Es una interesante alternativa para invertir pesos, pero hay que tener en cuenta que si se compra con dólares en la bolsa local (AA17D) su rendimiento es menor al 7%.
- En el tramo medio tenemos el Bonar 2024 (AY24) y el nuevo bono Bonar 2020 (AO20) que rinden 9,5% y 8,5% respectivamente. Este último de menor liquidez, dado que su emisión es 10 veces menor a la del 2024.
- En el tramo largo encontramos los bonos Discount (DICA) y Par (PARA), con rendimientos del 10% y 8% respectivamente.
En síntesis, los bonos cortos han sido los más beneficiados por el pago del Boden 2015, sobre todo en el mercado local. Al menos en el corto plazo parece haber más oportunidades en el tramo largo de la curva como en el DICA y el PARA.
Para los inversores que tienen pesos, el alza de las cotizaciones en dólares trajo aparejada una caída en el tipo de cambio implícito (pesos por dólar), y por lo tanto también parece una oportunidad para dolarizar las carteras.