En primer lugar, cabe decir que el triunfo del candidato centrista (que finalmente ha obtenido la victoria con mayor margen del que apuntaban los sondeos), estaba completamente descontado. En segundo lugar, están empezando a hacerse nuevas lecturas que no son tan positivas.
De un lado, en cuestión de semanas tendrán lugar las elecciones legislativas en Francia, dónde se precisa un nuevo triunfo de Macron para que éste pueda tener las manos libres para realizar las políticas prometidas.
Por otro lado, los bonos periféricos están aumentando su rentabilidad, ya que se empieza a temer que, superado el peligro de Le Pen, el Banco Central Europeo (BCE) pueda endurecer su discurso, y revertir las actuales políticas antes de lo previsto.
Los bancos, que saldrían beneficiados de una subida prematura de los tipos, son los que han liderado el cambio de signo de la sesión, pasando de ser los valores más alcistas a ser ahora los que más caen, junto con los recursos básicos.
Al margen de asunto francés, tenemos otras cuestiones sobre la mesa.
El viernes se publicó un dato de empleo en EE.UU. que quedó por encima de lo esperado (211.000 frente a 185.000), lo que supuso una clara alegría en los mercados. Europa terminó con fuertes subidas, y Wall Street también cerró en positivo, acercándose mucho a máximos anuales.
El Dow Jones se anotó un 0,26%, el S&P 500, un 0,41%, y el Nasdaq, un 0,42%.
Otro elemento de atención lo hemos tenido en China, que ha publicado datos de balanza comercial del mes de abril.
El superávit ha quedado claramente por encima de lo previsto, hasta 38.000 millones de dólares, pero tanto las exportaciones (8% frente al 10,4%) y sobre todo, las importaciones (11,8% frente a 18%), han quedado muy por debajo de lo previsto.
El Nikkei ha celebrado el triunfo de Macron con una fuerte subida del 2,3% (apoyada también por la caída del yen), y la Bolsa de Shanghái ha cerrado en negativo, con caídas del 0,7%.
En datos macro europeos, tenemos un dato de pedidos industriales de Alemania en el 1% esperado.
El precio de las viviendas en Reino Unido en abril ha descendido más de lo esperado. Por el contrario, el índice de confianza Sentix en la eurozona ha quedado por encima de lo previsto.
Esta tarde en EE.UU. no se espera ningún dato importante y tampoco tenemos resultados destacados de grandes empresas en el día de hoy.
El crudo sigue por debajo de los 50 dólares, pese a la insistencia de Arabia Saudí en prolongar el recorte de la producción.
El EUR/USD cae en estos momentos, pero sigue por encima de 1,09.
En resumen, el muy descontado triunfo de Macron no trae nuevas compras esta mañana, pero la fortaleza de las Bolsas europeas, en su mejor situación en una década, sigue siendo palpable.