En una sesión en la que la principal cita fue la reunión del Consejo de Gobierno del BCE, la última con el italiano Draghi al frente de la institución, los principales índices bursátiles europeos cerraron al alza, animados por unos resultados empresariales trimestrales que, en conjunto, están siendo mejores de lo esperado tanto en Europa como en Wall Street. No obstante, en el ámbito macroeconómico las noticias siguen sin ser positivas, como mostraron ayer las lecturas preliminares de octubre de los índices adelantados de actividad de la Zona Euro, los conocidos PMIs que elabora IHS Markit, que siguieron sin dar síntoma alguno de mejora. Es más, el sector manufacturero alemán sigue muy débil, mientras que la creación de empleo en la región comienza a ralentizarse significativamente, como se pudo comprobar en España tras la publicación de las cifras de la EPA correspondientes al tercer trimestre de 2019, que son las peores para este trimestre en muchos años -ver sección de Economía y Mercados-. Esta debilidad en el empleo fue uno de los temas que trató Draghi en su comparecencia ante la prensa tras la reunión del Consejo, en la que dijo que el mayor riesgo que afronta ahora la región era una posible recesión. En ese sentido, y en relación a la inflación, Draghi dijo que la debilidad del crecimiento económico actual estaba impidiendo que las subidas salariales se trasladaran a la inflación. No obstante, y en conjunto, la reunión, en la que como se esperaba no hubo nuevos anuncios en materia de política monetaria -el arsenal del BCE está prácticamente agotado-, no tuvo incidencia relevante en la marcha de los mercados en el día de ayer, con los inversores más centrados en otros temas, principalmente en las cifras que iban dando a conocer las cotizadas que publicaban resultados.
Algo similar pasó en Wall Street, donde los resultados empresariales monopolizaron la atención de los inversores. En este sentido, señalar que, a pesar de que en conjunto las cifras y las expectativas de los gestores de las compañías fueron bien acogidas por los inversores, hubo valores que sufrieron AYER un duro castigo tras publicar sus resultados y rebajar sus expectativas de negocio, como fue el caso de la industrial 3M (NYSE:MMM) (-4,1%), cuya caída pesó mucho en el comportamiento del Dow Jones, que cerró AYER ligeramente en negativo, o de la compañía especializada en redes sociales Twitter (NYSE:TWTR) (-20,8%). En sentido contrario, gustaron las cifras de Microsoft (NASDAQ:MSFT) (+2,0%), cuyo negocio en la nube para empresas sigue creciendo a ritmos elevados, los del fabricante de componentes para semiconductores Lam Research (NASDAQ:LRCX) (+13,9%), cuyo comportamiento arrastró al alza a todo su subsector de actividad, o los de Tesla (NASDAQ:TSLA) (+17,7%), que sorprendentemente fue capaz de lograr beneficios en el trimestre cuando el consenso de analistas esperaba que volviera a presentar pérdidas. Al cierre, tanto el S&P 500 como el Nasdaq Composite terminaron al alza, impulsados ambos por los valores del sector tecnológico, que fueron AYER los que mejor se portaron. Destacar que el mercado obvió la intervención del vicepresidente de EE.UU., Pence, en la que se mostró muy crítico con las prácticas empresariales y comerciales chinas y con la falta de respeto a los derechos humanos en el país, declaraciones que podrían enturbiar algo la relación entre ambos países, que ya de por sí están atravesando por un momento complicado.
HOY, en principio, esperamos que las bolsas europeas abran sin clara tendencia y con pocos cambios, con el Brexit nuevamente atrayendo la atención de los inversores ya que se espera que los líderes de la Unión Europea (UE) decidan si conceden o no un nuevo aplazamiento al Reino Unido para su salida de la región. En principio se manejan dos posibilidades, que pasan ambas por una nueva prórroga: i) una corta para que el Gobierno británico pueda adaptar la legislación del país al acuerdo de salida firmado con la UE y aprobado por el Parlamento del Reino Unido; y/o ii) una de tres meses, hasta finales de enero, que es el escenario más probable, en nuestra opinión.
Decir que AYER el primer ministro británico, Johnson, volvió a tensar la cuerda al hablar de convocar elecciones generales el 12 de diciembre. No obstante, para ello necesita que el mayor partido de la oposición, el Laborista, le apoye puesto que la convocatoria requiere que dos tercios de los miembros del parlamento voten a favor de la misma. Este escenario se nos antoja complicado, ya que existen fuertes discrepancias tanto entre los Conservadores como dentro del partido Laborista sobre la conveniencia de convocar unas nuevas elecciones en estos momentos. Con todo ello, lo que está claro es que el proceso del Brexit sigue muy encallado, aunque cada vez es menos posible que se produzca una salida del Reino Unido de la UE sin acuerdo. Como siempre, habrá que estar atentos a los movimientos de la libra esterlina, que es el mejor indicador de qué es lo que piensan los grandes inversores al respecto.
Por lo demás, señalar que tanto la agenda macro como la empresarial siguen siendo hoy intensas, destacando en la primera la publicación en Alemania de los índices que miden el clima empresarial, correspondientes al mes de octubre, y que elabora el instituto IFO. Por la tarde, y ya en EE.UU., se conocerá la lectura final del mismo mes del índice de sentimiento de los consumidores. En el ámbito empresarial destaca la publicación en Europa de los resultados trimestrales de Banco Sabadell (MC:SABE) (SAB), que han estado en línea o ligeramente por encima de lo esperado, dependiendo del margen que se analice, así como los de la cervecera belga Aheuser-Busch InBev, los de la teleco holandesa KPN (AS:KPN) o los del banco británico Barclays (LON:BARC). Además, Renault (PA:RENA) da a conocer sus ventas correspondientes al tercer trimestre de 2019. Por último, señalar que entre las empresas que publican sus cifras en Wall Street destacaríamos a Goodyear (NASDAQ:GT) y Lear, ambas del sector del automóvil, y a la compañía de comunicación Verizon (NYSE:VZ).