- Dada la situación de Grecia la probabilidad de una semana de negociaciones más volátil es alta
- Para el mercado de acciones de EE.UU. la semana no sólo se centra en Grecia, también en el final del 2T
- El sentimiento de los inversores se mantiene en una lectura neutral alta
Tristemente, Grecia continuó dictando los titulares la semana pasada, durante el fin de semana y hoy ha provocado una sangría en el mercado así como a mucha indecisión por parte de los inversores.
Tal y como apunté días atrás, Grecia parece no podrá abrir su sistema bancario el lunes y mientras no pueda predecir la reacción a muy corto plazo, la probabilidad de que tengamos una semana con gran volatilidad es muy alta.
Si nos centramos en una perspectiva de "días festivos" (es decir, que el sistema bancario permanece cerrado), este escenario representa un mínimo de confianza y es una mejor señal alcista que bajista.
Pero, si Grecia acaba cayendo en el default de sus pagos mañana 30 de junio o no, de cualquier manera un movimiento en una mejor dirección al alza se establece como una buena oportunidad esta semana.
En lo que respecta al mercado de acciones de EE.UU., no obstante, la semana que tenemos por delante no sólo se centra en lo que pase con Grecia, los inversores estarán atentos también al fin del segundo trimestre que termina mañana martes, el llamado fin de trimestre donde los fondos están ocupados mirando los escaparates para sus carteras.
Este escenario será seguido por los primeros días de negociación del tercer trimestre, donde el nuevo flujo de los fondos tiene que ponerse a trabajar, ya que en el pasado ha visto una tendencia de fluctuación de los valores.
Tenemos una gran variedad de asuntos en los que fijarnos esta semana así que permítanme empezar con lo básico: una verificación técnica en el índice de referencia S&P 500.
En mi actualización sobre el mercado de acciones de EE.UU. de la semana pasada, aseguré lo siguiente sobre el índice S&P 500, que también tiene cabida para esta semana: "El rango de rebote "agitado" persiste, es decir, la parte baja del rango es mejor que sea comprada que vendida, mientras qye la parte alta del rango es mejor que sea vendido que perseguida al alza".
En concreto, el soporte del S&P 500 se encuentra en los 2.075 puntos y la resistencia entre zonas de 2.120 y 2.130 puntos".
Mi caso base para el S&P 500 mantiene que podemos ver un nuevo máximo marginal antes de que tengamos un mejor movimiento correctivo, es decir, que un repunte hacia la zona de los 2.130 puntos podría finalmente dar paso a un movimiento hacia los 2.150 - 2.160 puntos.
Fuente: Saxo Bank.
La perspectiva para los índices de acciones de EE.UU. se basa en que el lento repunte en 2015 ha llegado a un impulso alcista menguante y ha llevado a un rango estrecho.
En lo que respecta al índice Dow Jones de Industriales, en el gráfico semanal multianual podemos ver el momentum alcista, representado por el índice de fuerza relativa en la parte baja del gráfico, que ha estado haciendo máximos decrecientes desde principios de 2013 y las bandas de Bollinger (líneas roja y verde) se encuentran ahora en niveles ajustados que no veíamos desde la década 2000.
Históricamente, esto lleva a mejores movimientos direccionales así como a una expansión de la volatilidad a corto plazo.
Fuente: Saxo Bank
Una simple, pero importante razón de por qué a través de la perspectiva del precio de la acción aún no podemos ser bajistas se debe a que tanto el sector financiero, así como las acciones de pequeña capitalización (Russell 2000) se siguen manteniendo mejor al alza que el S&P 500.
En el gráfico que mostramos a continuación, el S&P 500 está en la parte superior, el sector financiero en el centro y el Russell 2000 en la parte inferior. Debemos mantener este gráfico en mente.
Fuente: eSignal
El sentimiento del inversor se mantiene en lecturas neutrales altas (lo que no sorprende dada la lateralidad en los índices de EE.UU.) y el CBOE Volatility Index (VIX) sigue ajustando su rango (mínimos crecientes y máximos crecientes), que históricamente ha llevado a un repunte en la volatilidad desde una perspectiva multi-mensual.
Fuente: Saxo Bank
Mi caso base mantiene que un mayor repunte en la volatilidad de los bonos activará una mayor volatilidad así como una corrección en el precio de las acciones.
Como tal, si nos fijamos en el precio de los bonos del Tesoro del 30 de junio, podemos ver que se siguen sentando en el borde del último y mejor empuje hacia los mínimos de varios meses en base de cierre diaria y también rompió de nuevo su tendencia alcista de 2014.
Fuente: Saxo Bank
Otro signo de preocupación que merece la pena que vigilemos es el relacionado con el sector de semiconductores, al que he apuntado en muchas ocasiones en los últimos meses.
El pasado viernes, el índice de Philadelphia Semiconductor Index cayó un 2,45% dado que uno de sus componentes, Micron Technology (NASDAQ:MU), se desplomó cerca de un 20% en una sesión tras presentar unos resultados peores a lo esperado.
El sector de los semiconductores tienen un indicador de calidad líder y ahora buscan haber confirmado el máximo decreciente (flecha roja) frente a los máximos de principios de junio. El rebote a corto plazo es posible, pero desde una perspectiva de varias semanas y meses, este sector parece haber tocado techo a medio plazo.
Fuente: eSignal