Considerando diversos aspectos, los acontecimientos de hoy han sido beneficiosos para la libra. Como se esperaba, el Banco de Inglaterra ha decido aumentar su programa de compra de activos en GBP 50bn hasta GBP 325bn, en una operación que se espera esté completada a lo largo de los tres meses siguientes. En una declaración acompañando al anuncio, el BoE expresó su preocupación de que una caída significante de la economía de UK pudiera persistir y que, sin una compra adicional de activos, la inflación pudiera hacer que no se alcance el objetivo fijado por el Banco. Además, los políticos esperan que la economía continúe débil en el corto plazo; como tal, según nuestro punto de vista, más QE no se puede descartar una vez que esta ronda de compras sea completada en Mayo. En algunos aspectos, la voluntad del BoE de continuar con la acomodación responsable monetaria está recibiendo algunos aplausos en estos momentos de austeridad fiscal sin precedentes.
La libra acogió bien hoy las noticias de que su déficit comercial en Diciembre fue el más bajo de los últimos nueve años. Los volúmenes de las exportaciones en el último cuarto de 2011 aumentaron un 3.7%, en contraste con las importaciones que subieron únicamente un 0.7%. Como resultado el PIB inicial previsto para el Q4 de -0.2% es probable que sea revisado al alza. Interesantemente, particularmente dadas las incertidumbres presentes en Europa, el mayor contribuidor de la mejora en las cifras comerciales ha sido el crecimiento de los volúmenes de las exportaciones ( segunda mitad del año un 6%). Las importaciones se vieron afectadas por una demanda doméstica débil y cayeron levemente en la segunda mitad del año. El Banco también estará satisfecho de comprobar que las importaciones son ahora más baratas, lo cual, a su vez, está ayudando al Banco a conseguir su objetivo de inflación.
La confirmación de la que la economía se está equilibrando debe ser atemperada por la todavía evidente debilidad del sector industrial. La producción industrial consiguió aumentar un 0.5% en el último mes del año pero esto sigue a cuatro descensos en los cinco meses previos. Una demanda local débil y un clima templado han afectado a la producción de gas y electricidad. La producción manufacturera consigue compensar de momento el declive doméstico con el aumento de la externa.
La libra ha hecho progresos contra la mayoría de los majors hoy, en un momento en el que las nuevas dudas sobre Grecia han eliminado el apetito por la divisa única.