Ayer dijo Lagarde que el crecimiento mundial es un hecho, aunque es demasiado frágil y lento. Y amenazado por crecientes riesgos.
En su opinión, las autoridades económicas internacionales deben cooperar para combatir la pérdida de ritmo de crecimiento: reformas estructurales en los países desarrollados y emergentes. Naturalmente, expandir las políticas fiscales si se puede; mantener como mínimo el carácter expansivo actual de la política monetaria. Pero, de cualquier forma, actuar de forma coordinada.
http://www.imf.org/external/pubs/ft/survey/so/2016/POL040416B.htm
¿Recuerdan el G20? La consecuencia más clara en los mercados fue la petición para estabilizar los de divisas. A nivel económico, cambiar el énfasis de la política monetaria expansiva a políticas fiscales. Pero, de cualquier forma, la petición de reformas y ajustes que lleven a un mayor crecimiento potencial.
¿Y los riesgos? ya he hablado antes de su concreción en el caso de los mercados de divisas. Pero, hay mucho más: la aceptación de que la mayor integración financiera frente a la economía supone también un mayor riesgo en término de shocks en los mercados financieros internacionales. Algo de esto debió entender la Fed ante el claro cambio de sesgo observado entre los FOMC de finales del año pasado (saldado con subida de tipos) y las reuniones de este.
Y en concreto, la evolución de los mercados emergentes.
El FMI considera que los mercados financieros internacionales ahora están más correlacionados con el comportamiento de los mercados emergentes que en el pasado. Más que la integración macro, económica y comercio, son los mercados financieros los que actúan como vehículo de correlación de shocks. La excepción es la economía china, donde son las perspectivas macro frente a las financieras lo que pesan a nivel mundial….
La cuestión entonces parece clara: es importante mejorar la información sobre los riesgos financieros internacionales, sean a través de entidades financieras monetarias o no monetarias.
Pero, además, también resulta prioritario aumentar la transparencia de las políticas económicas (China, Fed) y reformas que aumenten el peso de la base doméstica inversora (emergentes) o que reduzcan y ordenen la gestión del riesgo/apalancamiento (desarrollados).