La cuenta corriente de la eurozona volvió a observar en el mes de julio un superávit por primera vez luego de unos cuantos meses.
La última vez que la cuenta corriente de los países que conforman la eurozona registraba superávit había sido en el mes de febrero de 2008.
En este caso, el superávit en las cuentas externas ascendió a los 6.600 millones de euros.
A pesar del resultado positivo de julio, la cuenta corriente de la eurozona aún debe recorrer un largo camino para consolidar el superávit alcanzado.
Es que el saldo acumulado anual de la balanza por cuenta corriente en los últimos doce meses hasta junio arroja un déficit de 108.700 millones de euros, el equivalente al 1,2% del Producto Interior Bruto (PIB) para los países de la zona del euro.
Las perspectivas para los próximos meses son positivas para el bloque regional en términos de cuentas externas
La última vez que la cuenta corriente de los países que conforman la eurozona registraba superávit había sido en el mes de febrero de 2008.
En este caso, el superávit en las cuentas externas ascendió a los 6.600 millones de euros.
A pesar del resultado positivo de julio, la cuenta corriente de la eurozona aún debe recorrer un largo camino para consolidar el superávit alcanzado.
Es que el saldo acumulado anual de la balanza por cuenta corriente en los últimos doce meses hasta junio arroja un déficit de 108.700 millones de euros, el equivalente al 1,2% del Producto Interior Bruto (PIB) para los países de la zona del euro.
Las perspectivas para los próximos meses son positivas para el bloque regional en términos de cuentas externas