Montevideo, 15 jul (EFE).- Los ministros uruguayos de Industria, Turismo y Medio Ambiente superaron hoy la interpelación a la que fueron sometidos en el Parlamento por los efectos en el medio ambiente de un millonario proyecto de extracción de hierro a cielo abierto de la firma india Zamin.
Después de una maratoniana sesión que duró unas 16 horas, el debate terminó cerca de las 03.00 horas locales (06.00 GMT) "sin consecuencia política" para los ministros, que fueron respaldados por la mayoría oficialista con 52 de 79 votos de los legisladores presentes.
"Mientras el Gobierno recalcó que no hay ningún compromiso con la empresa Aratirí, la oposición quedó disconforme" con las explicaciones pero no pudo lograr que los ministros se vieran forzados a dejar el cargo.
Aratirí es el nombre de la filial con la que la minera india Zamin pretende explotar un yacimiento minero ubicado a unos 300 kilómetros al noreste de Montevideo.
La compañía tiene como meta exportar 18 millones de toneladas de mineral cada año, con una inversión de 3.000 millones de dólares, la mayor de la historia de Uruguay.
El partido oficialista, el izquierdista Frente Amplio, tiene una mayoría justa en la Cámara de Diputados, con 50 de los 99 escaños.
El legislador Gustavo Amarilla, del Partido Nacional, fue el encargado de interrogar a los ministros sobre el proyecto, que se encuentra tan solo en fase de exploración, y sobre las consecuencias negativas que una explotación de ese tamaño tendría para el país.
Amarilla cuestionó la reciente reforma del código minero de Uruguay, impulsada por el Gobierno, y acusó al Ejecutivo de hacer esa norma al dictado de los intereses de Aratirí.
Los ministros interpelados insistieron en que el proyecto aún no ha sido aprobado, pese a mostrarse muy favorables a una iniciativa "productiva" que dará "valor agregado" a la producción uruguaya.
La titular de Vivienda y Medio Ambiente, Graciela Muslera, reconoció que la minería a cielo abierto provoca cambios irreparables en el paisaje, una de las acusaciones más repetidas contra el plan minero, si bien consideró que "es posible cerrar una mina en forma correcta y científica".
Además, señaló que la empresa generará más de 3.150 empleos directos durante su construcción y ocupará a 1.450 trabajadores cuando comience a producir, cifras desconocidas en la despoblada zona donde se instalará.
El ministro de Industria Energía y Minería, Roberto Kreimerman, negó que el código minero se haya reformado por Aratirí, sino "para ajustar al país a las demandas mundiales" e incrementar los beneficios para el Estado y la transparencia de la explotación.
El responsable de la cartera de Turismo y Deporte, Héctor Lescano, aclaró que "no hay ninguna asociación, de ninguna naturaleza" con la firma india, "y tampoco ningún grado de compromiso del Gobierno nacional con la empresa".
Justo cuando comenzaba la interpelación el jueves por la mañana, el presidente José Mujica criticó en su programa radiofónico semanal a la oposición por "poner palos en la rueda" y por no haberse pronunciado cuando el Ejecutivo le informó del tema al conocerse el proyecto, en 2007. EFE