Sao Paulo, 11 abr (EFE).-La economía brasileña se contraerá un 3,77 % este año, un pronóstico peor del que se tenía hace una semana, y la inflación alcanzará el 7,14 %, cifra que mejora la de hace siete días, según las últimas proyecciones divulgadas hoy por el Banco Central.
De acuerdo con el "Boletín Focus", publicación semanal del Banco Central que recoge los pronósticos de un centenar de analistas de bancos e instituciones privadas, el Producto Interior Bruto (PIB) brasileño se encogerá en 2016 un 3,77 %, dato ligeramente peor al 3,73 % calculado la semana pasada.
Para 2017 las previsiones auguran un crecimiento del PIB del 0,30 %, la misma proyección de una semana atrás.
No obstante, en el mismo informe se disminuye levemente la previsión para la inflación de este año, que pasa del 7,28 % al 7,14 %.
De cara a 2017, en tanto, la proyección para la inflación del 6 % que se mantuvo por ocho semanas tuvo también una leve reducción y pasó este lunes al 5,95 %.
La economía de Brasil se contrajo en 2015 un 3,8 %, lo que supuso el peor resultado en los últimos 25 años, y cerró el ejercicio con una inflación del 10,67 % que superó ampliamente el techo máximo oficial del 6,5 %, según datos oficiales.
Brasil atraviesa un período de recesión que queda plasmado en un aumento del desempleo y una alta tasa básica para los tipos de interés, la mayor de los últimos nueve años y que está en el 14,25 %.
Los analistas predijeron también que esa tasa acabará el año en el 13,75 %, el mismo porcentaje que proyectaron la pasada semana, mientras que redujeron del 12,5 % al 12,25 % la estimativa para 2017.
Con el recorte de gastos y otras medidas anunciadas el pasado año en el marco de un plan de ajuste fiscal, el Gobierno pretende alcanzar en 2016 un superávit primario equivalente al 0,5 % del PIB.
A las dificultades económicas se suma la crisis política que azota a Brasil, cuya presidenta, Dilma Rousseff, está amenazada con la apertura de un juicio político en el Congreso que puede costarle el cargo y que está siendo estudiado por una comisión especial en la Cámara de Diputados.
Dicha comisión, que analiza si existen méritos jurídicos para abrir el juicio, votará hoy el informe en el que su instructor recomienda darle luz verde al proceso.